Revista teatros

 Alfonso Lara es una de esas personas todoterreno que destaca en cada una de las facetas que pone en práctica. Actor, director y dramaturgo, ha hecho cine, TV y tea-tro –”Los hijos se han dormido”, “Emilia”, “Urtain”...– con directores de la talla de Veronese, Tolcachir o Andrés Lima.

• ¿A qué nos enfrenta “Páncreas”?

Como el buen teatro nos enfrenta a nosotros mismos. A través del humor en realidad estamos hablando de temas muy serios: la amistad, el fracaso emocional y la soledad de las personas, la enfermedad, el perdón, la muerte… Todo eso es lo que conforma “Páncreas” en forma de verso y con el humor por bandera.

• El lenguaje de los personajes es actual, pero en verso...

Le aporta originalidad y también una extrañeza, una cualidad teatral en el muy buen sentido de la palabra. El cine y la TV han bajado un poco la calidad de nuestra forma de hablar y el teatro está para cumplir una función de belleza. Hay chistes con el propio verso. “Pácreas” es una muy buena introducción para que los chicos y las chicas, los niños, se acerquen al teatro clásico sin ningún miedo

• Háblenos de Javilo.

Javilo es un hombre que conoció a estos dos amigos en una terapia para trastor-nos mentales porque había tenido un fracaso sentimental. Sigue prisionero de ciertas mentiras, de mucha autocompasión y de esa supuesta fecha que tiene señalada porque si no recibe un trasplante de páncreas va a morir.

• ¿Qué destacaría del trabajo de Patxo Telleria?

Yo destaco la valentía. Ha cogido lo mejor de la tradición del teatro español, pero no sólo por el hecho de hablar en verso, sino que es una pieza que teniendo mucha profundidad, tiene mucho humor, es heredera de Jardiel, de Mihura... En París o en Londres se convertiría en un clásico.