Publicado el 30 de Noviembre de 2017
Alfredo Sanzol. La dama boba
Obra: La dama boba
La mirada de Lope es muy moderna, se respira en la obra una atmósfera de igualdad y admiración por lo femenino
Siempre mira con ternura a sus personajes, su humor es fresco, no olvida el dolor y su arquitectura escénica es exquisita. Dramaturgo, director, ayudante de escena, adaptador de grandes clásicos... Alfredo Sanzol es, sin lugar a dudas, uno de los grandes nombres de nuestro teatro actual. No en vano, trabajos como “Delicades”, “Días estupendos” y “En la luna” le han valido tres Max y el Ceres al mejor autor teatral. A ellos se une el más reciente Premio Nacional de literatura dramática 2017 por “La respiración”.
¿Por qué esta obra, otro Lope, para montar con la cuarta promoción de La Joven CNTC? ¿Qué les ofrecía?
Es una obra esencial, muy compleja, construida con muchos niveles de lectura. Su apariencia de comedia romántica de enredo esconde preguntas esenciales sobre la identidad, sobre cómo los demás construyen nuestra identidad, y sobre el género y la visión patriarcal de la inteligencia. Es una pieza fundamental y debería conocerla todo el mundo.
¿Qué destacaría de estos jóvenes?
Su disciplina, organización y gestión del tiempo les permite crear el marco para trabajar con libertad artística. Es algo de lo que todos tenemos que aprender. Son profesionales que aman el arte al que han decidido dedicarse y esa pasión la transmiten. Tengo mucha suerte de poder trabajar con ellos.
¿Y qué les ha pedido al trabajar?
Me gusta crear las condiciones para que el actor desarrolle su personalidad creativa y se haga dueño de su trabajo. Es la mejor manera de disfrutar como espectador. Así que, sobre todo, les he pedido que disfruten de la libertad para crear la forma del espectáculo.
Supongo que para usted como director también será un reto…
Me han dado confianza, así que me han enseñado a confiar.
¿Cómo es el Lope que firma “La dama boba”?
Es un Lope que disfruta de la vida en Madrid, un Lope enamorado que se ríe de sí mismo en muchas ocasiones. Los poetas (como él) que aparecen en la obra son objeto de sus burlas.
Parece un Lope muy libre, también por el trato que da a las mujeres…
Sí, es cierto, la mirada de Lope es muy moderna, se respira en toda la obra una atmósfera de igualdad (con los límites propios de la época) y sobre todo una atmósfera de admiración por lo femenino. Lo bronco, lo brusco, lo tosco están desterrados.
Háblenos de su propuesta...
Hemos imaginado una casa burguesa muy grande que tiene en su centro una especie de gran sala de reuniones que sirve para celebrar, charlar, pasear, bailar… Todo está referido a nuestra época, nos gustaba pensar que los personajes podían subir con el público en el mismo ascensor para ver/hacer la función.
¿Cómo le sabe el Premio Nacional de Literatura Dramática?
Es un sabor de agradecimiento. Una manera de darme las gracias por el trabajo realizado, y yo sólo puedo devolverlo con mi trabajo, que siempre intentaré hacer cada vez mejor.
Otros proyectos entre manos…
Estoy escribiendo un proyecto que se llama “La Valentía” y que podremos ver en mayo en El Pavón Teatro Kamikaze.