Publicado el 01 de Diciembre de 2014
Arturo Fernández y David Boceta
Obra: Enfrentados
“Cualquier filosofía que prohíba amar está abocada a la crisis”, David Boceta
“Respeto absolutamente la unión de dos personas del mismo sexo y la equiparación de derechos a la institución matrimonial”, Arturo Fernández
Sabemos muchas cosas del actual éxito del teatro Amaya: cuenta con grandes premios internacionales como el Molière de Francia, está dirigida y protagonizada por el irresistible Arturo Fernández en el papel de carismático sacerdote católico y cuenta con la réplica de un David Boceta lleno de frescura en el rol de rebelde seminarista. Pero, ¿qué piensan, realmente, estos dos actores de las polémicas cuestiones que rodean a la Iglesia?, ¿y qué piensan sus personajes?, ¿coincidirán entre ellos y con sus propios roles escénicos? Escuchamos a Arturo, David, Padre José María y Tomás de la Casa, personas y personajes, más ‘enfrentados’ que nunca.
¿En qué se equivoca la Iglesia en los tiempos que corren?
PADRE J.M.: No se equivoca tanto la Iglesia como algunos hombres que la forman.
ARTURO: Creo que el actual Papa está intentando corregir el alejamiento de la Iglesia como institución de la sociedad.
TOMÁS: En huir del debate. En temer al cambio. En no ser lo suficientemente flexible. Todo cambia, a un ritmo de vértigo, y la iglesia tarda siglos en las modificaciones sutiles.
DAVID: En intentar tener voz y voto en la vida política.
¿Qué opinan del celibato sacerdotal?
PADRE J.M.: Es una norma de la Iglesia Católica.
ARTURO: Lo mismo.
TOMÁS: Es uno de esos principios que deberían estar sujetos a revisión.
DAVID: Cualquier filosofía que prohíba amar, en cualquiera de sus expresiones, está abocada a la crisis.
¿Deberían las mujeres tener los mismos derechos y oportunidades dentro de la Iglesia?
PADRE J.M.: Creo que la labor de las mujeres en la Iglesia es enorme e insustituible. Con independencia de que no puedan ser ordenadas sacerdotes. Que es otra norma de la Iglesia.
ARTURO: Lo mismo.
TOMÁS: Claro. Lo que me parece increíble es que aún exista ese debate en una institución que pretende estar presente en la sociedad. Es arcaico.
DAVID: Por supuesto que sí. Deberíamos mirar hacia la iglesia anglicana.
¿Qué opinan del matrimonio homosexual?
PADRE J.M.: Como el Papa Francisco, no juzgo a quien tiene buena voluntad y se acerca a Dios.
ARTURO: Respeto absolutamente la unión de dos personas del mismo sexo y la equiparación de derechos a la institución matrimonial, con independencia de la semántica.
TOMÁS: No somos los religiosos personas que debamos juzgar a quién debe amar ninguna persona. Y mucho menos inmiscuirnos en cuestiones sociales. Entiendo que un gobierno laico puede plantearse el matrimonio homosexual. En una iglesia no creo que lo veamos en siglos...
DAVID: ¡Por favor! Lo que me parece es que hemos tardado mucho en legalizarlo en nuestro país.
¿Qué moraleja se lleva de “Enfrentados”?
PADRE J.M.: La fe y la vocación de entrega que implica el sacerdocio tienen muchos caminos…
ARTURO: El valor del diálogo.
TOMÁS: La iglesia tiene que pararse a pensar que si no se adapta a los tiempos corre el peligro de perder definitivamente a los más jóvenes, y por lo tanto, a la futura generación.
DAVID: Si tienes una vocación en la vida debes cuidarla, alimentarla y tener paciencia. Nunca es tarde para volver a encontrarte con ella.