¿Cuál fue su primer contacto con Shakespeare y con “Sueño de una noche de verano”? ¿Lo recuerda? ¿Cuándo fue y qué pensó entonces de esta obra?
Mi primer contacto con la obra fue cuando vi la adaptación de Lindsay Kemp en el teatro de la Comedia, mi tía Nuria estaba en la compañía. Yo tenía unos 4 años de edad. La vi mil veces. Me fascinó. Tanto que cuando la Compañía hizo la película en el año 85, dirigida por Celestino Coronado, a Bimba y a mi nos dejaron ser 2 hadas de los bosques.
Muchos años más tarde asistí en una producción de la ópera de Britten en el festival de ópera de Garsington.
¿Ha cambiado mucho aquella mirada de entonces a la mirada de hoy cuando se mete de lleno en la obra? ¿Qué ha descubierto o qué está descubriendo de ella en medio de este proceso?
Desde entonces mi visión de la obra ha cambiado muchísimo. Cuanto más la conozco, estudio y leo más compleja me parece. Lo que a primera vista me pareció una "gamberrada" de Shakespeare, ahora me parece una compleja obra maestra que estudia al ser humano desde muchísimos puntos de vista diferentes.
¿Qué nos diría de “Sueño de una noche de verano”, qué es lo más importante que tenemos que saber de esta obra para disfrutarla al cien por cien?
De Sueño hay que saber que era la obra de Shakespeare favorita de Lorca. Que es como una fiesta. Que trata sobre cosas con las que todos podemos empatizar. Que en un mundo lleno de conocimiento y estadísticas, hay una ventana a la magia y a lo desconocido. Que suena tanto a música que 3 compositores han hecho ópera con ella.
Probablemente sean innumerables las versiones y puestas en escena que se han hecho de esta obra. ¿Shakespeare no caduca?
Yo creo que los genios nunca caducan. Shakespeare siempre pertenecerá al presente. Siempre hablara de cosas que nos preocupen , que nos importen. Siempre será relevante. Imprescindible.
¿Por qué esta obra para montar con esta promoción de La Joven CNTC? ¿Cómo surge el proyecto y qué les ofrecía esta pieza para montarla con los jóvenes?
En cuanto me pidieron que hiciese una propuesta para dirigir a la joven me fui a verlos. Al salir del teatro pensé en esta obra. Muchos personajes con mucho peso. Todos roles importantes. Actores jóvenes que representarían a personajes de su edad.
¿Qué destacaría de estos jóvenes que ahora ponen en escena “Sueño de una noche de verano”? ¿Hay futuro, hay presente?
Los actores con los que tengo la enorme suerte de estar ensayando son: Profesionales, rápidos, inteligentes, arriesgan, se divierten, proponen, juegan, crean. Tienen todos muchísimo talento. No podría estar más contenta.
Supongo que para usted como directora también será un reto trabajar con ellos. ¿Qué ha aprendido, cómo ha sido el proceso personal y profesionalmente para usted?
Para mi es un reto dirigir esta obra. Es una obra complicada y con muchos personajes. Pero me siento increíblemente cómoda con los actores de la joven. Tenemos un diálogo fluido. Nos lo pasamos de coña y trabajamos mucho. De ellos aprendo todo el rato.
Háblenos de su propuesta... ¿Qué vamos a ver, cuáles han sido sus líneas maestras, dónde ha querido poner el acento, qué es lo más importante que quería transmitir, cuáles han sido sus influencias o sus referencias?
Carolina África ha hecho una adaptación genial y moderna. Los figurines de Clara Peluffo son preciosos y gamberros. La escenografía de Carmen Castañón es austera y juguetona . La luz de Juanjo Llorens es mágica y la música de Arnau Vila vibrante.
Entre todos intentamos contar la historia desde un punto de vista que tenga relevancia para el público hoy.
¿Cómo de orgullosa y/o cansada está Bárbara Lluch de que a su nombre siempre se le añada eso de “nieta de Nuria Espert”? ¿Le ha pesado la familia a veces? ¿Nunca se planteó dedicarse a otra cosa?
No se puede estar más orgullosa de lo que estoy de ser nieta de Nuria Espert. No sería quien soy si no perteneciera a la familia de la que vengo. De mis abuelos, mi tía Nuria Moreno y mi madre Alicia he aprendido y sigo aprendiendo muchísimo.
Nunca he pensado en dedicarme a nada que no fuera el teatro.
Como su abuela ha actuado y ha dirigido. ¿Se siente heredera de ella en algún aspecto concreto o nada que ver?
No me siento heredera del trabajo de mi abuela. No más que otra persona que haya visto sus montajes o a ella sobre el escenario. Desafortunadamente nunca he trabajado con ella, así me sentiría más cercana a algún director al que haya asistido mucho.
Comenzó como actriz bien pequeña, pero al final cambió el rumbo. ¿Cuándo y por qué, si es que hay un punto de inflexión, se enamora de la ópera y de la dirección?
Empecé como actriz muy pequeña. Luego estudié interpretación y pensé que esa sería mi vida. En el 2005, hice una ayudantía a una directora alemana en una ópera de Wagner. Desde el primer de ensayo supe que estaba donde quería estar. Siempre había amado la ópera y algo hizo "clic". Algo que no había sentido siendo actriz. Muchos años más tarde empecé a pensar que me gustaría dirigir. Desde 2005 he trabajado muchísimo, he tenido muchísima suerte y gente increíble ha confiado en mi.
Aparte de este montaje tan especial, ¿algún otro proyecto entre manos que pueda contarse?
Después de este Sueño volveré a la Música para dirigir "La del manojo de rosas" en el Teatro Solís de Montevideo y "El Rey que Rabió" en mi queridísimo Teatro de La Zarzuela de Madrid.
