Revista teatros

A veces lo que mal empieza mal acaba, pero es que esta desternillante comedia, bien conocida por ser el mayor éxito mundial de su género, demuestra que el verdadero desastre no conoce límites. Y transformar la desdicha de un grupo teatral amateur en pura carcajada es la especialidad que esta función demuestra cada noche en La Latina. Charlamos con Carla Postigo, una de las grandes responsables de esta auténtica ‘risoterapia escénica’ a la que conocemos en las tablas por títulos como “Nine, el musical” o “Rocky Horror Show”, en la pequeña pantalla por series como “45 revoluciones” o “Centro médico” y en el cine –“Las mujeres de Cervantes”–. Por ANY POP

• ¿Por qué intuye que “LFQSM” está catalogada como la comedia teatral de mayor éxito mundial?

Porque contiene muchos tipos de humor. Es cierto que, generalmente, se trata de humor absurdo, pero es tan continuo que creo que es difícil no reírse en algún momento. También es cierto que el ser humano suele divertirse con el sufrimiento ajeno en algunas ocasiones, sobre todo, si no es extremadamente grave, y aquí hay mucho de esto (risas).

• Si le contara la sinopsis a su mejor amiga, ¿qué diría?

Un grupo universitario de actores amateur tratan de interpretar una obra teatral tipo Agatha Christie o Sherlock Holmes llama-da ”Asesinato en la Mansión Haversham”, pero todo les sale mal, aunque ellos no se rinden en ningún momento. ”Show must go on”.

• ¿Cómo es su rol escénico?

Sandra es la gran diva de la compañía. Ella interpreta a Florence y es muy autoexigente, aunque egocéntrica y creída, por eso trata de quedar siempre perfecta en escena y ante los medios. Tiene su trabajo preparado de forma impecable, pero sus compañeros se ven afectados por continuas dificultades que le afectan absolutamente a ella a lo largo de toda la obra, por no mencionar a Annie... Que solo la vamos a mencionar.

• Si pudiera darle un buen consejo a Sandra, ¿cuál sería?

Que medite sobre su egocentrismo y se aleje de las puertas.

• El momento más loco de este personaje se produce cuando…

Uf... Hay unos cuantos. Quizás el más loco, y con loco me refiero a desconcertante, sea cuando sale de un lugar del que ni siquiera ella sabe cómo ha llegado. Es algo que la gente siempre me pregunta: ”¿cómo has hecho eso?” o ”¿cómo has salido de ahí?” o ”¿cómo has entrado?”.

• Si tuviera que interpretar a otro de los personajes, ¿cuál elegiría y por qué?

Annie. Fui al primer casting con la idea de hacer Annie, aunque nunca la probé y solo hay dos personajes femeninos. Me gustaría porque es todo lo contrario a Sandra (Florence). Es un personaje cómico, Annie es graciosa por naturaleza, mientras que lo que hace gracia de Sandra es lo que le va sucediendo. ¡Sandra es más seca que un bocata de arena! Pero es mi bocata de arena (risas). La amo.

• Una anécdota divertida que haya vivido con el público en La Latina:

Cuando no me dio tiempo a ponerme las bragas... (risas). Es decir, sí llevaba algo, pero es lo que llevo debajo de las bragas y es de color carne, una faja, y a todo esto yo hacía una aparición inesperada donde tomaba la carga absoluta de la atención del público. Necesité mirar a las caras de la gente para ver la primera impresión. Fue interesante y divertido, aunque no me gustaría que se volviese a repetir (risas).

• Una crítica o comentario acerca de “LFQSM” que le dejó impactada:

Algunas de las que se podrían considerar como negativas me encantan, porque hay gente que se queja de cosas que son lo que justamente tiene que ser, por eso, mi favorita es la de ”es que los actores están muy sobreactuados”. También me da ‘regustejo’ recordar la de ”es que los técnicos no paran de molestar al principio de la obra”. Ahí es cuando pienso ”¡Hala! Es que aquí lo negativo es superpositivo para no-sotros”. Muy guay.

• Una fantasía profesional pendiente de cumplir, por loca que suene:

Dos lugares con nombres grandes: Hollywood y Broadway. ”Hay que soñar y pedir a lo grande, que luego la cosa merma mucho” dice mi madre. Eso sí, todo con trabajo, esfuerzo y agradecimiento, o así me enseñaron. ¿Alguien que venga a mi casa a con-versar conmigo en inglés, please? (risas).