Publicado el 01 de Abril de 2018
Entrevista a Daniel Grao por Ilusiones
Obra: Ilusiones
A veces lo importante no es lo que se dice, sino esa necesidad de ser contados, nosotros y los relatos
¿Qué es “Ilusiones”, cómo definirían este texto?
Ilusiones habla especialmente de eso: lo ilusorio. Muchas veces lo importante no es tanto lo que se dice sinó esa necesidad de ser contados (nosotros y los relatos). Y como una misma historia puede ser tan distinta, según quien la cuente.
¿De qué nos habla esta “comedia existencialista” oscura y cómica, en qué llagas mete el dedo?
Particularmente en las historias de dos matrimonios. Sus vidas. Los relatos son deshilachados,contradictorios a veces. Pero a partir de ahí los temas son los de la propia vida.
¿Qué les sedujo de este proyecto?
Te voy a ser sincero. Lo primero que me sedujo fué la idea de trabajar con Miguel del Arco en el Teatro Kamikaze.
Háblennos cada uno de su personaje, quiénes son, cómo son:
Lo interesante de este proyecto es precisamente algo que nos propone ser Miguel: “atletas emocionales” Y es que desde nuestros narradores somos “poseídos” por los personajes que vamos narrando. En mi caso, mi narrador se niega a entrar en según qué profundidades. Quiere juego, humor... pero hay relatos que tienen que ser contados...
Una frase de su personaje podría ser…
“Es broma, ¿no?”
¿Cómo ha de ir el espectador a ver “Ilusiones” para que la obra cale de verdad en él?
Dispuesto a viajar. Con ganas de que le cuenten un cuento. Sin la necesidad de tenerlo todo atado y sin la esperanza de una historia lógica.
Viripaev propone un recorrido vital por la trayectoria de dos parejas que intentan, juntos y por separado, encontrar su lugar en el mundo. ¿Ustedes, solos o en pareja, han encontrado su lugar o es algo que se busca y construye cada día?
Creo que ese lugar se llama “aquí”. Igual es tan sencillo que por eso necesitamos inventar caminos (aunque irremediablemente acabarán llevándonos al “aquí”).
¿Cómo es el trabajo con Miguel del Arco, cómo es como director?
¡Una maravilla! Talentoso con mucho sentido del humor y amoroso con el trabajo. ¿Qué más se puede pedir?
Si no vamos a ver “Ilusiones”, nos vamos a perder…
Un existencialista divertimento. Un cuento mágico.