Revista teatros

Fiesta Corral Cervantes da luz verde a su 4ª edición en una nueva ubicación y en medio de una pandemia. ¿Cómo ha afrontado esta circunstancia y cuáles son las medidas implementadas para poder disfrutar de estos 61 días con total seguridad?

Desde el ámbito de la Fundación Siglo de Oro y en relación con el Corral Cervantes la hemos enfrentado siempre en la idea de que podríamos llevar a cabo esta cuarta edición. Siempre en la esperanza de poder cumplir con esta cuarta etapa del festival, también en el cambio de ubicación y, por supuesto, siempre sujetos a aquellas cosas de las que íbamos siendo informados y de que teníamos contacto a través de los organismos pertinentes y del resto de compañeros y compañeras, tanto a nivel de producción como de compañías como de direcciones artísticas de festivales en lo que han sido estos meses de incertidumbre.

Llegados a este punto, con la grandísima ilusión de sacar adelante este festival y relaciónandonos como todos y como se debe con todas las cuestiones que son, por una parte, determinadas por las autoridades al respecto de estas medidas necesarias y, por otra parte, también las propias que nos da nuestro sentido común al respecto de favorecer unos espacios de exhibición tanto para público como para compañías en los que la seguridad sea un componente fundamental en la edición de este año.

En ese sentido por la propia naturaleza efímera de nuestro festival, el hecho de desarrollar, entre comillas, proyectos constructivos diferentes para cada edición, ya en marzo, cuando considerábamos la posibilidad si es que se abría de llevar a cabo el festival, ya planificamos un modelo de Corral o de interpretación de corral al aire libre, sí techado pero que no tuviera paredes y de la misma manera Ana Gil, la responsable de la instalación, hizo un diseño de un auditorio para 500 personas de tal manera que conformando las disposiciones por zonas más o menos por la tendencia del público de ir acompañados, dos, tres, cuatro personas, favorecer como poco que pudiesen ver el espectáculo, garantizando una distancia de seguridad, 200 personas a la vez.

Estamos deseando asistir a los 24 espectáculos programados. ¿Cuál ha sido el criterio de selección, qué rasgos definen esta extensa programación?

En nuestro caso siempre abiertos a la posibilidad del error y de la consideración subjetiva, pero para nosotros el criterio fundamental en primer lugar para la elección de los espectáculos que forman parte de la programación de la Fiesta Corral  Cervantes es la calidad.

Afortunadamente dentro de toda la Fundación hay un amplio y diferente perfil de profesionales, tanto autores como directores como productores, distribuidores, personal de comunicación, que además a lo largo de los años se ha relacionado con el teatro del Siglo de Oro, del teatro patrimonial, que tiene el suficiente bagaje como para poder identificar dentro de esta subjetividad este principal criterio que es el de la calidad. La calidad de la propuesta y una calidad también a la hora de considerar lo que pensamos que merece el público y este tipo de teatro.

Desde su opinión personal, ¿qué 3 espectáculos no deberíamos perdernos por nada del mundo (y por qué)?

Lo de escoger tres montajes me resulta imposible. Es tanto ya el camino que llevamos con estas compañías, con estos montajes, con estas propuestas artísticas desde que empezamos a recibir las primeras propuestas de las diferentes compañías para participar en el Corral que ya los sentimos prácticamente como si fueran todos nuestros.

Tenemos la suerte de contar con el póquer de los grandes autores, tenemos Tirso, tenemos Lope, tenemos Calderón, tenemos Cervantes…

Tenemos diferentes interpretaciones o formas de concebir la relación que tiene el espectador del siglo XXI con el teatro del Siglo de Oro, abundamos o tratamos de abundar precisamente en las formas de expresión artística en la utilización de este repertorio orientadas a su, digamos entre comillas, salvaguarda futura, a lo que sería garantizar su supervivencia a través de la experimentación y de la búsqueda de, no nuevos lenguajes, pero sí reinterpretados y básicamente también en un amplísimo espectro de creadores, tanto por edades como por formación. Así que en ese sentido al cabo de la propuesta total muy satisfechos.

He de reconocer que aunque sí que vemos una cada vez mayor presencia de las mujeres en las autorías y, aunque lo tratamos de fomentar, seguimos adoleciendo de la presencia de mujeres en la dirección. Ya hemos podido comprobar en años anteriores que los textos del Siglo de Oro escritos por autoras como Ana Caro de Mayén o María de Zayas funcionan con nuestro tiempo, funcionan con el cuerpo y el alma de los espectadores del siglo XXI pero sí que nos gustaría recibir más propuestas en las que la dirección fuera liderada por mujeres.

Aparte del mejor teatro, ¿de qué otras actividades vamos a poder disfrutar en esta nueva edición?

Dentro de lo relativo a otras actividades que se van a desarrollar en el Corral en principio nosotros cuando concebimos este festival el núcleo de todo es la expresión teatral o la experiencia teatral compartida. Al servicio de este compartimento de la experiencia nosotros dentro de este carácter festivo que queríamos que tuviese el festival, también en relación con el propio tiempo en el que se desarrolla, en el verano de Madrid, en las fechas concretas, que son finales de julio, agosto y septiembre, queríamos de alguna manera tratar de imprimir este espacio que va un poquito más allá de lo teatral favoreciendo un lugar de encuentro para el vecino de Madrid, para el ciudadano de Madrid, para el visitante de España y también para el visitante de otros países. Por ejemplo, la oferta de gastronomía o la posibilidad de compra de artesanía soportase la configuración de una experiencia que fuese más allá de lo exclusivamente teatral favoreciendo una forma de encuentro lúdico entre ocio y cultura.

Si quiere añadir algo más, ¡adelante, por favor!

Si hablamos de la capa más externa de las otras actividades o las otras ofertas dentro de la propia Fiesta Corral Cervantes como es gastronomía, como es artesanía, como es espacio de encuentro para los niños tanto en posibles actividades como dentro inserta en la programación con la extensión del Festival de almagro a través de su programa Barroco Infantil también en lo que sería en la parte interna del festival a la hora de configurarlo, de tratar de configurar en la propia propuesta artística elementos como la inclusión de un concurso que deriva en este año clarísimamente del proyecto AlmagrOff, del Festival Internacional de Almagro, de las compañías que habían sido seleccionadas y que dadas las circunstancias en esta ocasión tristemente no se ha podido desarrollar allí en almagro y que nosotros con la aquiescencia de Ignacio García y del propio festival y con todo su apoyo hemos podido ponernos en contacto con estas compañías y desarrollar un concurso parecido en algunos de los términos.

Y también a la hora de tratar de conectar un nuevo público con las formas de expresión en este caso que se vinculan a través de lo poético, de lo versal, organizar conciertos en un módulo que hemos llamado Poetas de Oro del siglo XXI en el que cantautores como Rebeca Jiménez o Ramiro van a tocar los sábados por la noche tratando también en la mezcla de lo cultural, de lo teatral, de lo artísitco y de lo poético favorecer una mayor conexión y una mayor relación con estos tipos de público que son canteras enormes para el teatro y exclusivamente para el teatro Barroco básicamente porque ya tienen de alguna manera definido y refinada esta tendencia por la expresión poética.