Revista teatros

 Actriz, dramaturga, directora y miembro fundador de la compañía Micomicón. Con “La ciudad    sitiada”, “Árbol de la esperanza” o “Unos cuantos piquetitos” se ha ganado el reconocimiento del    público, la crítica y la profesión

¿Qué es “Nada tras la puerta”?

Un espectáculo hermoso y necesario. Un espectáculo que habla de lo que está ahí pero hasta ahora hemos preferido no ver.

Tras esa puerta, ¿qué hay?

El Sur, los pobres, el hambre, la necesidad, las mujeres violadas, los niños soldados...  Pero también los desahucios, el paro, los niños malnutridos que empiezan a ser noticia en nuestro país, el derrumbe de nuestro mundo tal y cómo lo conocíamos. Pero para algunos sigue habiendo “nada tras la puerta”.

¿Qué le aporta poder escribirlo a pie de escenario?

Es una experiencia enriquecedora que aporta frescura y vitalidad.

Y su texto habla de...

“NAJLA” habla de las niñas que se inmolan porque han sido obligadas a casarse con hombres mayores. Hace muy poco fue noticia el caso de una niña que falleció a causa de su brutal violación en la noche de bodas. Esto sucede a diario. Son niñas que se venden y se compran, que se juegan a las cartas o, simplemente, se regalan para que no supongan gasto.