Publicado el 02 de Marzo de 2019
Las mujeres de la escena: Chos, Irma Correa y Ángela Cremonte
Obra: Las mujeres de la escena
Dice Natalia Menéndez, actriz, dramaturga, gestora teatral y ahora directora de “Mi niña, niña mía”, que “necesitamos seguir caminando todos y todas para evitar la desigualdad, el maltrato y aportar luz a muchas mujeres que están en una situación muy complicada”. Conscientes de que no están todas las que son, porque son muchas, cada vez más y con más fuerza, pero de que son todas las que están, este mes volvemos a poner cara y dar voz al teatro en femenino. Desde la serenidad o el dolor, desde la reivindicación de espacios o la de los logros conseguidos, actrices, directoras, dramaturgas, adaptadoras, productoras, todoterrenos todas, empoderadas y fuertes, reflexionan sobre la situación que vivimos las mujeres hoy. Por VANESSA RAMIRO
CHOS
DIRECTORA DE "PIJAMAS" EN LOS TEATROS LUCHANA
Creo que las cosas empiezan a cambiar por fin, más despacio de lo que debieran, pero al menos ya somos conscientes como mujeres de que es necesaria una pequeña revolución y se está haciendo. Yo desde aquí pediría más guiones con mujeres como protagonistas. No se trata de contar solo historias de mujeres, hablo de que historias de todo tipo puedan ser interpretadas por nosotras. Podemos ser muchas más cosas que "la esposa" o "la madre" de ellos que son los protagonistas.
Como directora de casting he podido comprobar que aún hoy, hay oficios que por norma son asignados a hombres a la hora de escribir un guión, mientras que otros roles siempre se da por hecho que deben ser interpretados por mujeres. Es hora de empezar a cambiar eso. Las mujeres estamos muy presentes en todos los trabajos y sectores y hay que empezar a reflejarlo.
IRMA CORREA
FIRMA LA DRAMATURGIA DE "FEDERICO HACIA LORCA" EN LOS TEATROS DEL CANAL
Creo que las cosas empiezan a cambiar por fin, más despacio de lo que debieran, pero al menos ya somos conscientes como mujeres de que es necesaria una pequeña revolución y se está haciendo. Yo desde aquí pediría más guiones con mujeres como protagonistas. No se trata de contar solo historias de mujeres, hablo de que historias de todo tipo puedan ser interpretadas por nosotras. Podemos ser muchas más cosas que "la esposa" o "la madre" de ellos que son los protagonistas.
Como directora de casting he podido comprobar que aún hoy, hay oficios que por norma son asignados a hombres a la hora de escribir un guión, mientras que otros roles siempre se da por hecho que deben ser interpretados por mujeres. Es hora de empezar a cambiar eso. Las mujeres estamos muy presentes en todos los trabajos y sectores y hay que empezar a reflejarlo.
ÁNGELA CREMONTE
ACTRIZ EN "MI NIÑA, NIÑA MÍA"
Yo estoy empezando a entender lo que significa encontrar tu voz, tu propia voz, como mujer y para mí como mujer significa como ser humano, como ser humano que, además, es mujer. Yo no me defino en el mundo sólo como mujer, me siento ser humano. Cuando decimos ‘yo como mujer’ siento que me estoy castrando de una parte de mi identidad que es primero ser humano.
Estoy encontrando mi propia voz porque estoy, nunca me había pasado tanto, empezando a encontrar algunas dificultades. He empezado a tener pequeños conflictos por dar mi opinión, por ejemplo, no creo que tenga que ver sólo con ser mujer, sino con tener una determinada edad, una determinada apariencia… estoy empezando a encontrar mi propia voz y a ponerla en el mundo y a no esperar nada con eso ni frustrarme si no produce lo que quiero.
Creo que tenemos, todos lo sabemos, mucho camino por recorrer y creo que mujeres somos todos, los hombres también son mujeres y creo que hombres somos todos, las mujeres también somos hombres, y a veces se nos olvida en nuestros discursos integrar al otro. Las mujeres no podemos avanzar sin ellos igual que ellos no pueden avanzar sin nosotras, tenemos partes muy diferentes, pero partes muy parecidas, muy complementarias. Yo creo que tenemos que darnos más la mano y creo que todo pasa por la educación, no por el abroncamiento.
Cuando tú abroncas al otro, lo separas de ti y no te escucha y creo que a las mujeres nos interesa que los hombres nos escuchen y viceversa. Cuando cualquier persona me entra fuerte, hay algo de mí que no le escucha porque me está agrediendo, pero si me hablan con dulzura y con un tono intentando enseñarme algo que me ayude, me relajo mucho más. Insisto, hay mucha falta de educación en los colegios y en las casa y todo tiene que pasar por ahí.