Si bien son muchos los espectadores que ya han reído con esta comedia desde que fuera estrenada en 1988 por primera vez, la pieza más exitosa de José Luis Alonso de Santos regresa a las tablas con un aire más fresco, moderno y sensual. La nueva versión encuadra la escena en un piso céntrico de Madrid. Josep Linuesa, Carlos Chamarro y Mónica Corral son los intérpretes destinados a convertir esta ‘pareja de tres’ en puro enredo. «Pares y Nines» se estrena el próximo día 29 de junio en el Teatro Príncipe.
1988. QUEDA LEJOS aquel primer estreno de “Pares y Nines” en Alicante, justo un año antes de su premier en el Teatro Infanta Isabel de Madrid. Los aplausos recibidos en ambas plazas condujeron la pieza a una contundente gira nacional realizada por Pepe Sancho, Manolo Cal y Carmen Tejedera. Poco después, en 2004, el montaje llegó al mítico Estudio 1 de Televisión Española a cargo de un elenco formado por Vanesa Rasero, Carlos Iglesias y Toni Cantó.
Hoy, con el precedente de las tres temporadas de éxito cosechadas con su versión catalana –“T’estimo però no tant”, estrenada en 2014– la nueva versión ya traducida al castellano de Miquel Murga mantiene la esencia de aquel “Pares y Nines” primigenio, pero se adapta a un contexto mucho más moderno, picante y actual. “Este es, básicamente, un divertimento de alta comedia. Sus personajes sufren mucho y acaban comprendiendo que la vida está compuesta de amores y desamores. Quien ha vivido un poco, va a reconocerse en alguno de los personajes y, sobre todo, ¡va a reír mucho!”, asegura Josep Linuesa, protagonista de la función junto a Mónica Corral y Carlos Chamarro.
EL ENREDO ESTÁ SERVIDO
Fede y Roberto son dos amigos que comparten algo más que una convivencia eventual en el piso del primero: ambos tienen en común a Carmela, su exmujer, y ambos se enfrentan ahora a una peligrosa, divertida y potente revolución hormonal por culpa de Nines, una joven vecina: “Ella es el desencadenante de la tragedia y la comedia a la vez. Es una vecina muy joven, muy guapa, muy activa. La vida es de color de rosa para ella. Vive en el apartamento de debajo de Fede y, como no tiene ducha, sube a ducharse a casa de Fede muy a menudo. Son muy amigos…”, comenta Linuesa y continúa: “A Fede le viene muy bien tener una vecinita que sube de vez en cuando y, a Nines, le parece bien tener un madurito que le deja hacer, jugar, reír y contarse las historias. Nunca han tenido nada entre ellos, pero sí parece haber algo latente ahí que no se acaba de desarrollar. Roberto, recién llegado y hecho polvo, descubre en Nines una mujer hermosa y… pasa lo que pasa: se acaban enrollando, hecho que desencadena muchas emociones en todos ellos”.
La crítica ha dicho…
“La situación con Nines y los problemas del pasado provocan una serie de enredos, malentendidos y escenas de auténtica locura que hacen que se complique la trama, siempre todo bajo la comedia”, BCNpress.
“La actitud de los personajes tiene puntos de machista, pero esto acaba ridiculizado porque el personaje femenino de la comedia manipula, hace y deshace lo que quiere”, La Vanguardia.
“Tres personajes radicalmente opuestos son los protagonistas de esta historia de amor y amistad, con toques de humor y cierto erotismo”, ElDiario.es.