Dice Álvaro Tato que “Molière, como Lope en España o Shakespeare en Inglaterra, es un profesional de las tablas, un productor, dramaturgo, actor y empresario, un farandulero que conoció la cárcel y el salón cortesano, el carro de comediante y el jardín palaciego. Es, en todos los sentidos, nuestro bisabuelo”. Cuando se celebran los cuatrocientos años de su nacimiento, Ay Teatro nos trae «Vive Molière«, una visión delirante, desenfadada e iconoclasta del gran comediógrafo, de su ámbito teatral y de su siglo. Y lo hace con un elenco joven, música en directo y escenas y fragmentos de sus obras. La cita, en el Teatro de La Abadía del 1 al 30 de diciembre.
«Molière es el gran comediante de Occidente que, junto a Shakespeare y Lope de Vega, funda la comedia moderna sobre premisas humanistas: la exploración del alma humana a través de la risa. Hoy cumple cuatrocientos años y sus obras siguen siendo el patrón cómico del teatro universal por su audacia, su ingenio, su ritmo, su poesía, su gracia, su frescura y su permanente actualidad porque, como él dijo, “la ridiculez humana es inagotable””.
Así define Álvaro Tato al genio francés de la comedia que, a pesar de cumplir 400 años, aún tiene mucho que decirnos.
“En primer lugar, recordarnos que vivimos en sociedades contradictorias, hipócritas y, por tanto, perfectibles siempre. Además, nos recuerda la imprescindible necesidad del humor incorrecto, agudo, mordaz, sin el cual solo tendríamos una sociedad rígida y, por tanto, susceptible de quebrarse en mil pedazos”, apostilla Yayo Cáceres.
Juntos dramaturgo y director firman este canto al autor cómico más importante de la modernidad. Un homenaje, una indagación y, sobre todo, una celebración de su despliegue de personajes, situaciones y escenas memorables.
Celebrando la risa
En el cielo, la diosa Fama anuncia su intención de casarse con un genio del teatro. Sus criados Dato, Mito y Chisme la llevan a París para conocer a un tal Molière y seguir su azarosa vida y sus hilarantes obras.
Los jóvenes Kevin de la Rosa, Juan de Vera, Marta Estal, Laura Ferrer y Mario Portillo –Ay Teatro, o lo que es lo mismo, Emilia Yagüe, Álvaro Tato y Yayo Cáceres, tiene la política de ir alternando proyectos con gente consagrada y actores jóvenes– afrontan el desafío de asumir casi medio centenar de personajes en esta historia de amores y desamores, celos, encuentros y desencuentros, duelos, danzas, canciones… y una selección de las escenas más divertidas, irónicas, sarcásticas y escandalosas del genio de la comedia.
“Hemos elegido diversas escenas y textos que muestren las principales facetas del poliédrico dramaturgo, desde la farsa pura de “La escuela de los maridos” o “El burgués gentilhombre” hasta la amargura tragicómica de “El misántropo”, pasando por la agudeza paródica de “El avaro” o la acidez crítica de su “Don Juan” y su “Tartufo”. Intentamos trazar así un panorama de todos los ‘molieres’”, explica Tato.
Todo servido en una delirante comedia en verso con poesía, muchas risas y, sello inconfundible de la pareja Tato-Cáceres, música en directo.
“Vamos a escuchar una música íntegramente compuesta para el piano y, además, una canción cantada por los cinco actores con un ukelele y hasta una especie de mini ópera de unos pocos minutos”, finaliza Cáceres.