La primera colaboración entre la CNTC y la CND es una fiesta

La primera colaboración de la Compañía Nacional de Teatro Clásico y la Compañía Nacional de Danza es una fiesta donde la danza y el teatro se encuentran con la música para preparar el camino que recorrerán juntos después. Bajo la dirección escénica de Laura Ortega –con quien hemos charlado en esta entrevista– y musical de Alicia Lázaro y en colaboración con los coreógrafos Mar Aguiló y Pau Arán, el Teatro de la Comedia estrena «Fandangos y tonadillas» y reúne a un maravilloso elenco de actores, bailarines, cantantes y músicos entregados a una noche de final imprevisible… 

“¡Ya tocaba! Ahora que empezamos a ver la luz al final del túnel, nos merecemos un poco de alegría, un empujón de optimismo”.

Así, con el entusiamo contagioso de Alicia Lázaro, directora musical de estos “Fandangos y tonadillas”, arranca el año en la Comedia. Aires de fiesta La primera colaboración entre la Compañía Nacional de Teatro Clásico y la Compañía Nacional de Danza es una fiesta que aúna teatro, danza y música y que parte de una llamada a Alicia Lázaro de Lluís Homar y Xavier Albertí:

“Me presentaron la idea, aún en trazos, pero con algunas directrices claras: las coreografías contemporáneas y la exigencia de montar una fiesta con música del XVIII para el público del siglo XXI”, nos cuenta.

Exigente al máximo en la investigación de materiales y la forma de abordar los proyectos –“Cuanto más rigurosa eres en la búsqueda, en el estudio, más puedes aportar. Este espectáculo necesitaba mucha exigencia para no caer en la banalidad o, peor aún, encorsetarse en un cliché de ‘recreación historicista’”, afirma–, Lázaro y la directora Laura Ortega han armado un espectáculo multidisciplinar en el que viajaremos en el tiempo y volveremos a oír la Corte y su Real Cámara, las capillas musicales de las iglesias, los teatros, los salones de los nobles, las barberías, las calles, los ciegos y sus romances, las campanas que marcan horas, a Laserna, Esteve, Soler, Boccherini...

“Hay un personaje, Garrido, que tiene una tarea, infinitamente pesada, que es entretenernos, estar siempre disponible y ser buen anfitrión de una fiesta en la que falta un tenor. Mientras va a buscarlo, que es más o menos lo que pasa en “El italiano fingido”, de Ramón de la Cruz, lo que el espectador ve es una sucesión de cuadros y escenas musicales en los que también se baila, y mucho”, nos cuenta la directora.

Los cantantes líricos María Hinojosa, Cecilia Lavilla y Ángel Ruiz, el actor Rafa Castejón, los bailarines Sara Fernández, Yoko Taira, Iker Rodríguez, Mar Aguiló e Isaac Montllor y los músicos Alicia Lázaro, Beatriz Amezúa, Marta Mayoral, José Ignacio Gavilanes, Silvia Márquez y Laura Salinas ponen voz, cuerpo y música a estos “seres noctámbulos reunidos una noche de carnaval, justo antes de que comience la Cuaresma. Aparte de Garrido y La Caramba, que interpretan a otros personajes, están estos invitados, los músicos y bailarines, y un tenor, que no es el que buscaban”, afirma la directora.

“Es fiesta y también reflexión. La tonadilla es un género nada ‘menor’, que refleja el mundo con humor. En ocasiones es humor sencillo y popular, otras ácido o sarcástico, pero siempre inteligente. A veces, incluso, se mira a sí mismo, al mundo del teatro, sus excesos, sus penurias. Pero siempre hay una seguidilla final, para despedir al público con la sonrisa puesta”, finaliza Alicia Lázaro.

 

NOTICIAS RELACIONADAS

Lo más leído
REVISTA TEATROS GRATIS

¡Apúntate a nuestra newsletter!

Recibirás un email semanal con la revista completa, la actualidad destacada y ventajas exclusivas.