Drogas, amor, miedos y adicción. Las cuatro patas de esta silla moldeada por Stephen Adly Guirguis llegó a la escena madrileña hace un año con la garantía de su arollador éxito en Nueva York que cosechó seis nominaciones a los prestigiosos Premios Tony. La versión española ha sabido adaptar la esencia del original y ha subido su apuesta proponiendo tres caballos ganadores: la banda sonora, creada e interpretada por El Langui, la dirección de Cuco Afonso y un elenco artístico formado por Juan Díaz, Raquel Meroño, Juan Carlos Bellido, Bárbara Merlo y Alberto Jo Lee. Podremos verla a partir de mañana en el Teatro Príncipe.
“Un chico de barrio de gran ciudad, Jakie, metido en todo tipo de líos, drogas y alcohol, comparte un amor casi adolescente que cree inquebrantable con su chica de siempre, Verónica. En su deseo de abandonar el alcohol, Jakie se pone en manos de su gran amigo Rafa, por el que tiene un sentimiento filial y a quien nombra ‘padrino’ de su rehabilitación. Poco a poco, los acontecimien-tos harán que Jakie se vaya dando de bruces con la tozuda realidad e irá comprobando, en carne propia, la dificultad que supone controlar su propia vida”. Es el planteamiento que Cuco Afonso, director del montaje, comparte con nosotros acerca de este drama con tintes cómicos y añade: “Es una historia de amor y desencuentro. Tierna y dura a la vez. Personajes al límite en busca de su felicidad que esconden su verdadero ser”.
Principales novedades
Con la salida del reparto de Miguel Hermoso, el reestreno madrileño del texto de Aldy Guirguis ha apostado por un doble elenco “con el fin de afianzar un núcleo estable de actores y para poder afrontar con garantías los nuevos proyectos que tenemos en mente”, apunta Afonso. Paco Manzanedo, Malcolm T. Sitté, Sonia Dorado y Federico Aguado dan nombre a las nuevas incorporaciones de un proyecto que, después de casi un año de representaciones, ha dejado más de una anécdota divertida: “Jo Lee es subcampeón del mundo de taekwondo. Cuando realiza en escena algunos de sus legendarios golpes y coloca su pie con violencia y rapidez felina a un centímetro de la nariz del personaje de Rafa, ver la cara de éste, os aseguro que nos hizo reír y mucho (risas). ¡Sobrecoge, por no decir otra cosa…!“.
