¿Cual sería la mejor definición para esta comedia dramática?
ANDONI FERREÑO: Una obra a veces divertida, a veces dramática y siempre emocionante.
RAMÓN LANGA: Cóctel de emociones.
Háblenme de sus personajes.
ANDONI: Interpreto a Cosme, el pequeño de los dos hermanos. El revolucionario, el inconformista, el valiente y osado en un principio. El que toma la decisión de escaparse de casa dejando un gran escándalo detrás para huir de la situación familiar y social que vive en esa etapa de su vida.
RAMÓN: Álvaro es todo lo contrario a su hermano. Es el típico que se ha quedado en casa haciendo una vida muy burguesa, aguantando a los padres, a la familia, con la misma novia de toda la vida… Y eso es lo que le produce los traumas y las inseguridades que al principio niega pero que luego tiene que afrontar necesariamente.
¿Cuál es el peor error de sus roles?
RAMÓN: La cobardía.
ANDONI: Creer que huyendo puede dejar atrás todas las ataduras que le unen a esa casa.
El momento más emocionante de la función se produce cuando…
ANDONI: Sin darse cuenta y con mucha ternura, ambos vuelven a su infancia.
RAMÓN: Reconocen lo mucho que se quieren y se han echado de menos.
¿Y el más divertido?
ANDONI: Cuando deciden jugarse la herencia como acto de rebeldía.
RAMÓN: Cuando vuelven a jugar como cuando eran niños.
Lo que más admira de su compañero de reparto es:
RAMÓN: ¡Muchas cosas! Su tesón y su capacidad de trabajo.
ANDONI: El compromiso, la ductilidad, el saber hacer y el conocimiento de su profesión.
¿Cómo describirían la sensación que les produce el ‘veneno’ de interpretar encima de las tablas?
RAMÓN: Es una especie de miedo–placer que te pone la adrenalina a cien. Creo que es la mejor droga que existe: el escenario y el público.
ANDONI: Es sentirte vivo a través de la vida de otra persona o personaje.
Un momento teatral inolvidable…
ANDONI: El día que estrené “Solo para mujeres”, mi debut teatral, al encontrarme a la salida de mi camerino con doña Amparo Rivelles, que vino entusiasmada a felicitarme.
RAMÓN: Cuando hacía la función “Pregúntame por qué bebo”, interpretaba a un personaje que entra a veces en el aseo para orinar o vomitar y había un hombre en el público al que le pasó lo mismo: ¡Cada vez que iba yo, tenía que ir él también!
Dejando a un lado el trabajo, la mayor pasión de sus vidas es:
RAMÓN: ¡Iba a decir las mujeres…! (Risas) Pero es un chiste. Quitando a mis hijos, por supuesto, los caballos.
ANDONI: Intentar encontrar una pasión que me apasione más que mi trabajo.