Los orgasmos de su vecina de arriba inspiraron a Cesc Gay para escribir esta comedia. ¿Cómo son sus vecinos de arriba? ¿Más silenciosos?
La verdad es que no tengo ni la menor idea (risas), no sé ni quiénes son porque estoy en un sitio de paso, pero la verdad es que siempre he vivido en casas, nunca he tenido vecinos, no puedo hablar de anécdotas de vecinos porque no lo he sufrido.
¿De qué habla «Los vecinos de arriba», a qué nos enfrenta?
CANDELA: Habla de la tragedia de sostener una pareja. Hay que cuidarla. Los seres humanos acabamos siendo espejos de otros y cuando una pareja no está muy bien y escucha a los de arriba se plantea cosas de sus propia pareja: ‘qué le harán a esta señora que a mí no’, ‘por qué grita tanto’, ‘qué clase de placer es capaz de provocarle ese hombre que yo como hombre no soy capaz’…
¿Recuerda qué fue lo primero que se le pasa por la cabeza cuando lee el texto?
Sí, no hacerla, para nada (risas). Me habían ofrecido algo de teatro y el miedo me había hecho no aceptar, pero ya me noto más mayor, me importan otras cosas y se me han quitado muchos miedos. No quiero meterme más presión de la cuenta. Lo hago con todas las ganas. El trabajo también es pasárselo bien y es en lo que estoy ahora.
¿Cómo se está sintiendo?
Bien. Le oí decir una cosa maravillosa a Juliette Binoche: ‘me da la sensación de que molesto en todos lados y cuando estoy delante de un plano es es el sitio más cómodo’. Me ha pasado algo similar en el escenario. Estoy donde tengo que estar, me siento cómoda e intento dar lo mejor de mí.
¿Que haya coincidido con la primera vez del director ayuda?
A mí era algo que me tranquilizaba pero también te digo que era su primera vez, pero él venía de haberla montado en Barcelona y estaba como más trillado que yo. Yo en parte también la hice por eso, dije ‘es Cesc, es de cine, como yo, es su primera vez’, pero venía con un éxito a sus espaldas de dos años. Esta función ha arrasado en Cataluña.
La comedia ha triunfado en Barcelona. ¿Garantía de éxito o más presión?
Es que ni lo he pensado, ni para bueno ni para malo. Pilar Castro, Xavi Mira y yo fuimos a ver la función a Barcelona y Pilar que somos amigas, hablamos ‘esta es la función que hemos visto en Barcelona, pero no tiene que ser la función que hagamos en Madrid’. La función es otra.
Háblenos de su personaje.
Ana es una mujer en un momento del matrimonio aburrida, con muchos reproches que hacerle al marido, en un momento de la pareja no muy bueno, con una niña pequeña, con poco tiempo para dedicarse a la pareja, pero una mujer con bastante orgullo y con unas ganas de estar más atendida por parte del género masculino. No digo que Ana sea aburrida, está aburrida de la vida que lleva, pero ella no es aburrida en absoluto. De hecho hace cosas que no son propias de una mujer aburrida, pero no te puedo hacer un spoiler (risas).
¿La monotonía es el peor enemigo de una pareja?
No soy nadie para hablar de las parejas, no soy el paradigma, no me ha ido ni bien bien, ni mal mal, o sea, no considero que sea yo propia ni para dar consejos de pareja, ni de actriz ni de nada.
A modo de alegato final: No debemos perdernos “Los vecinos de arriba” porque…
Entre otras cosas las mujeres para saber lo que no debemos hacer y lo que no debemos aguantar.