¿Qué es “Radiocomedia”?
Un show de comedia ambientado en la radio de los 80, donde los actores recuer-dan cómo jugaban a la radio de pequeños. Monólogos, música, vídeos, animación, entrevistas, noticias, invitados en directo… no falta de nada en este espectáculo donde el humor es el protagonista.
¿Cuándo y cómo comenzó su amor por el medio radiofónico y cómo surgió la idea de este monólogo?
Me crié en la radio, ya que mi padre trabajaba en una emisora y vivíamos justo arriba, por lo que hacía los deberes rodea-do de vinilos y micrófonos.
Este espectáculo es audiovisual. ¿Qué tipo de contenidos veremos y escucharemos en pantalla?
Podréis ver vídeos musicales que acompañan a la música, piezas de animación, llamadas de oyentes, servicios informativos… ¡pero lo mejor es que lo veáis!
¿Y en cuanto a la música?
Todas las canciones son originales, eso sí, con algún tributo a grupos de la época, como OBK.
Uno de los momentazos que más risas despierta entre el público es…
Cuando cuento cómo conseguí unas zapatillas Air Jordan 1, que me costaron un ojo de la cara. No tenía pensado contarlo, pero amigos y otros cómicos me obligaron a ello. ¡Y creo que acertaron…! (risas).
¿Qué hacía de los radiocassettes algo tan mágico que lograba emocionar por encima de plataformas actuales como Spotify?
Nos costaba mucho grabar las canciones de la radio sin que apareciera el locutor de por medio y, cuando eso sucedía, era mágico.
¿En qué ha cambiado la radio actual con respecto a la ochentera?
Antes se vivía mucho más y nos tirábamos horas escuchándola, esperando la canción que querías que pinchara. Ahora la tienes pulsando un click.
Para usted, los grandes referentes del medio radiofónico siguen siendo:
Hay grandes profesionales que siguen en activo. Me considero fan de Julián Ruiz y Julio Ruiz, pero no son gemelos.
En suma de todo, ¿por qué recomienda asistir a su propio show?
Somos muchos los cómicos que hacemos espectáculos en teatros, pero este tiene de diferente que es un formato donde a la comedia se le une otras ramas artísticas pero que tiene un objetivo: ¡que te partas el ojete!