• ¿Qué ofrece ”Cartas de amor”?
Una historia de amor sobre todo, una obra de teatro epistolar en la que dos personas que han compartido muy poco tiempo juntos en su vida –pero sí un gran amor entre ellos– se escriben durante cincuenta y tantos años. Es una obra muy especial, diver-tida y emocionante. Hacer esta obra ha sido la experiencia profesional más bonita de mi vida, la más sencilla y relajada, el proceso más bonito que he tenido.
• ¿Qué historia plantea?
La pieza recoge las cartas en las que se va contando su historia y, a través de ellas, somos capaces de visualizar lo que ha sido la vida de los dos personajes, la gente con la que han compartido sus días.
• ¿Qué le atrajo de este singular proyecto para aceptarlo?
Que era muy diferente a todo lo que yo había leído, nunca había contado una obra en la que los personajes lo que hacen es leer. Era muy curioso que, aunque sólo se habla de ellos dos, uno es capaz de visualizar al escucharles un montón de situaciones, de personajes. Y que tiene un final tan bonito y emocionante… Me parecía una obra perfec-ta para lucir un gran reparto, como ha sido el caso.
• ¿Quiénes y cómo son los dos grandes protagonistas?
Andrew es un hombre muy organizado, muy responsable, obsesionado con hacer lo correcto y lo que la gente espera. De hecho, termina metiéndose en política con la obse-sión de ayudar a los demás. Melissa es todo lo contrario, es una mujer muy inestable que siempre ha sido muy libre y ha hecho lo que le ha dado la gana. Siendo personajes tan diferentes, son muy atraídos entre sí y se pasan toda la vida juntos apoyándose y ayudándose.
• Después de trabajar mano a mano, ¿qué opinión le suscita Miguel Rellán?
A Miguel ya lo conocía porque había trabajado mucho con él, es muy amigo mío, y me parece un actor extraordinario, hu-milde, siempre está dispuesto a ayudar.
• ¿Y Julia Gutiérrez Caba?
Conocer a Julia ha sido una de las cosas más importantes que me han pasado en mi carrera, sin duda. En lo profesional, es una maravilla porque, a pesar de su edad, es una actriz súper moderna que no fija nunca un tono, que tiene una escucha espectacular, que está relajada en el escenario. Es un gusto ver simplemente cómo pasa las hojas de las cartas, ver cómo van cayendo al suelo…
• ¿Y en lo personal?
Ha sido un regalo conocerla. En una pro-fesión en la que cualquiera que hace una simple serie se cree que es el actor más importante de la industria, Julia, que sí que es realmente una de las actrices más impor-tantes de la historia de España, jamás la oirás presumir. Su profesionalidad es absoluta. Si quedábamos a la una en mi casa, ella estaba 15 o 20 minutos antes esperando en el por-tal sin subir porque no quería molestar. De verdad que haberla conocido y ver cómo es ha sido un regalo.
• Tras su gira nacional, “Cartas de amor” regresa al Bellas Artes. ¿Por qué considera este nuevo estreno algo altamente recomendable?
¡Porque nos despedimos ya! Es el final y no vamos a volver a hacerla. Es una función que nos ha dado muchísimas alegrías, que ha ido muy bien, y creo que merece la pena por verles a los dos. Seguramente sea una de las últimas oportunidades que se tenga de ver a Julia en un escenario, sobre todo por-que no quiere hacer más teatro, y es una actriz descomunal. Verla es un lujo que la gente debería vivir al menos una vez.
• David, ¿En qué otros proyectos po-demos encontrar su participación?
Ahora mismo tengo en cartel “Los hijos” y “Billy Elliot” –por tercer año en Madrid–. Como productor y adaptador, tengo “Per-fectos desconocidos” y en otoño estrenaré un montaje de “Grease” –el musical– inter-pretado por adolescentes. ¡Seguramente va a ser el primer montaje mundial en el que los actores tienen la edad de los personajes!