• Sabemos que esta es la comedia teatral más exitosa del mundo, pero… ¿cómo la presentaría usted con sus propias palabras?
“LFQSM” es la mezcla perfecta entre Monty Phython y Agatha Christie que ha conseguido que más de 8 millones de espec-tadores en más de 30 países terminen ago-tados de reírse tanto. ¡En escena escuc-hamos carcajadas cada 10 segundos duran-te 2 horas! Es un chute de energía que se contagia por todo el patio de butacas.
• ¿Qué historia traslada?
La historia trata sobre una compañía de teatro amateur que se dispone a estrenar una obra de suspense… pero todo lo que puede salir mal en escena sale, incluso, peor.
• ¿Qué personaje interpreta en la función?
A Chris, el director de “Asesinato en la mansión Haversham”, la obra policíaca que se intenta representar en escena. Él se ha otorgado a sí mismo el personaje del Inspec-tor Carter, cuya misión será desenmascarar al asesino en esta historia.
• ¿Qué caracteriza a Chris?
Es un hombre con mucha más ambición que talento. En su cabeza, este montaje teatral es una obra maestra y él un director y actor magnífico que está rodeado de compañeros incompetentes frente a un público que no entiende su arte. Cuando algo no le sale bien, se pone histérico y pata-lea como un niño pequeño. Eso sí, nadie puede decir que no es un apasionado de su trabajo.
• Esa frase de su personaje que disfruta cada vez que la pronuncia:
“Bajar por las escaleras”. Parece una frase insustancial, pero… ¡¡ahí lo dejo!!
• ¿Qué otros personajes presenta esta comedia?
La gente va a encontrarse una compañía de teatro muy variopinta: desde una diva de las tablas, un intérprete con problemas de memoria, un técnico que aborrece la obra o una regidora con miedo escénico, hasta un actor con problemas de ego, uno que no sabe ni hacer de muerto y otro que más que actuar… pasaba por ahí.
• Uno de los momentazos que más risas desata la función es ese en el que…
Hay muchos y están muy igualados en cuanto a respuesta del público, pero uno de los que destacaría sin hacer mucho spoiler –cosa que es muy fácil a nada que hable de la obra– es un momento en el que los ac-tores no son capaces de terminar una escena y dan paso a la siguiente. Algo hace que no se pueda avanzar, pero ellos no entienden por qué. Ahí el teatro se viene abajo.
• ¿Por qué sale bien “La función que sale mal”?
Creo que el elemento principal es el montaje en sí, que es una maquinaria de relojería probada y ajustada tras su paso por 30 países. Son 2 horas de una coreografía muy bien construida en la que los ritmos y la energía están enfocados a favor de la comedia.
• Una anécdota curiosa vivida en directo con esta función:
Antes de comenzar el show, algunos actores estamos en el patio de butacas mientras el público entra. Uno de los espectadores comentó –mientras se sentaba– que venía a ver “La función que sale mal” y un compañero mío, metido ya en el personaje, le contestó que nosotros íbamos a representar “Asesinato en la mansión Haversham”. El señor se fue enfadadísimo a la taquilla del teatro porque pensaba que le habían dado una entrada para la obra equivocada (risas).