¿Quiénes y cómo son sus personajes en la pieza?
Interpreto a la alcaldesa del pueblo. Durante la función, se va a encontrar en una difícil tesitura. Tendrá que decidir entre el bien económico para el pueblo o el bien moral para con ella misma y el resto de habitantes. Creo que su característica principal es su capacidad dialéctica y manipuladora.
Uno de los ideales que ustedes, personalmente, comparten con su rol:
En la obra original el alcalde –ahora alcaldesa– es una persona conservadora y con ideales que se alejan mucho de los míos.
¿Cómo son el resto de personajes?
En líneas generales, somos habitantes de un pueblo y cada uno ocupa un rol determinado dentro de esa sociedad. Está el médico, el periodista, la alcaldesa… Cada uno defiende sus intereses dentro del conflicto que plantea la función.
¿Qué hace definitivamente recomendable este estreno en el Kamikaze?
El hecho de que el público va a tener que participar y posicionarse moral y éticamente durante la representación. No recomiendo la función a quien quiera venir a sentarse al patio de butacas y no cues-tionarse su lugar en la sociedad. ¡Va a generar controversia!
Irene, ¿qué le atrajo de este proyecto y qué cree que puede aportarle, como actriz y como persona, la intensa implicación que tiene prevista junto a Teatro Kamikaze?
Me atrajo volver a trabajar con Àlex, coincidir con Israel y el resto de compañeros, enfrentarme a esta función y, sobre todo, el reto que supone dar vida y humanidad a una persona con la que me cuesta identificarme. Siento que mi compromiso con el teatro en general y con el Kamikaze en particular es muy grande. Esta temporada les tiene que quedar claro a nuestros dirigentes que el Pavón Teatro Kamikaze es un espacio de creación y cuestionamiento ético, social e intelectual indispensable.
¿En qué otros proyectos podremos verles próximamente?
En la función “Hermanas” de Pascal Rambert junto a Bárbara Lennie, en la reposición de “Blackbird” –ambas en el Kamikaze– y continuaré con la gira de “Vania”. En otoño, se estrenará una película documental que he rodado en Namibia, pero aún no sé en qué plataforma.
Más allá de los focos y los escenarios, ¿qué aficiones les pierden en su tiempo libre?
Me encanta la música, ahora estoy aprendiendo a tocar la guitarra. ¡Quizá algún día pueda tocarla en escena…! Y mi gran afición es hacer collages. Me relaja mucho.