¿Cuál es o cómo es el romance que podría simbolizar la vida de María Juncal?
El romance de mi vida es el baile. El romance, que es la historia que podemos contar, se entrelaza permanentemente con mi baile, con mis viajes, con el centro de flamenco en el que aprendí y aprendo. Con las ilusiones, con el siguiente sueño…
¿Qué es “La vida es un romance”?
Es un cancionero, es la tradición oral que tanto nos identifica. La idea de cualquiera de nosotros como un caminante incansable que aún agotado o desorientado continúa la senda. Al fin, lo que hacemos desde siempre, fantasía o realidad, contar historias…
¿De dónde nace este espectáculo?
El espectáculo surge de una imagen que me fascina: el corro de personas que atentas y embebidas escuchan y viajan con las historias de aquel que las cuenta. En otro tiempo el momento más esperado de las gentes… La música es una composición original de Riky Rivera, Óscar lago y Pino losada. El proceso está muy activo, continúa abierto. En los ensayos que ahora nos tienen felizmente reunidos el flamenco vuelve a imponerse y resurge el mismo toque y el mismo cante que ya no son iguales… Siempre genuino, siempre el instante. Lo estamos disfrutando mucho.
Está dirigida por Ángel Rojas, uno de los principales referentes en el mundo del flamenco y la danza española.
Ángel Rojas siempre tiene algo que aportar que redondea. Es alguien que escucha y observa y que es capaz de vivir en tu idea… Su experiencia es una riqueza que brinda generoso. En términos estrictamente profesionales ha sido muy sencillo para mi trabajar con él. Es algo que quería desde hace tiempo. Es riguroso y exigente desde la serenidad de saber qué es lo que quiere.
“La vida es un romance” se estrenó en agosto de 2019 y a finales de 2020 hizo lo propio con “Bailaoras”. Vaya momento para crear, estrenar y girar, ¿no?
Los meses de confinamiento bailé en casa. Bailaba como podía en mi cuarto, pero no dejé de hacerlo. Marcarme pautas y horarios diariamente ayudó mucho. Mis días tenían quehaceres, pero nada de eso me alejó de la tristeza y el dolor de lo que sucedía a diario. No puedo decir que fue un momento en el que mil ideas vinieron a mi cabeza. Más bien lo contrario. Poco a poco logré ir reconectando con mi otro mundo. Entonces necesité de las ilusiones, de los sueños que nos hacen imaginar.
A pesar de todo y dos años después el espectáculo sigue más vivo que nunca.
Dos años después “La vida es un romance” necesita vivir y casi renacer. Ahora me pareciera que estoy ante un nuevo espectáculo y con esa sensación estamos ensayando. Ninguno de nosotros es la misma persona hoy. Espero lograr contar con el público para disfrutar juntos de este momento en el que solo el escenario termina de perfilar una obra.
“La dama del flamenco”, “Raza, pasión y vida”, “Belleza, fuego y ternura”… ¿Qué hay detrás de cada una de esas palabras?
Hay miles de horas de trabajo físico y mental. El tiempo en forma de segundos me ha hecho falta… Creo firmemente que el trabajo y la dedicación son condiciones innegociables en el arte, celoso, al fin, si no le brindas todo de ti, no ilumina el camino. Amo la danza con todo mi corazón y disfruto cada minuto que le dedico.
Y si mira hacia atrás, ¿qué balance hace hasta ahora?
Si miro hacia atrás hoy solo puedo decir “Gracias” por el camino que me trajo hasta aquí. Pienso que me he equivocado muchas veces, pero me siento satisfecha de haber seguido el camino de mis ideas.