¿Qué es “De haber nacido”, cómo surge este singular proyecto?
Para nosotros es un reto que nos ha propuesto la Compañía Nacional de Teatro Clásico a través de Lluís Homar y Xavier Albertí para participar en este programa que tienen de “Diálogos contemporáneos” sobre una obra clásica, pero desde un lenguaje actual y en nuestro caso, también, desde una disciplina diferente a la de texto. No es algo que nosotros solemos hacer, aunque a lo largo de nuestra trayectoria hemos tenido diferentes momentos de trabajos con escritores –incluso nosotros mismos hemos escrito textos propios para nuestros espectáculos–. Sin embargo, en nuestros espectáculos habituales, la dramaturgia la vamos construyendo poco a poco, hecha de diferentes capas entre las cuales suele estar el texto, pero no son obras que se articulan en torno al texto, por lo tanto la propuesta era un gran reto, más tratándose de una obra en verso cuya trama argumental está todo el rato atravesada de un detalle que se puede perfectamente extrapolar a cualquier situación actual.
¿Cómo han materializado el reto propuesto?
Por un lado, hemos estudiado desde nuestra perspectiva la obra de Calderón de la Barca pero, también, hemos querido trabajar sobre una obra de Pasolini que llamó “Calderón”, una obra teatral que escribió en 1973 que se centraba mucho en lo que reescribía de la figura de Rosaura y la centraba en una Barcelona franquista de después de la guerra civil. Esto ha sido un hallazgo increíble, ver cómo él le dio la vuelta y nos sitúa en otro lugar.
¿Qué define esta particular ‘coreografía del alma de Rosaura’?
Hemos elegido al personaje de Rosaura como inspiración, como un personaje que está marcado por todas unas líneas de conflicto a las que decide enfrentarse a través de la simulación. Al mismo tiempo, es un camino de lucha para encontrar su propia identidad más profunda. Teniendo en cuenta las tres veces que se presenta a Segismundo con un disfraz diferente, hemos estudiado esa voluntad que tiene el personaje de preguntarse por su propia identidad y también cuestionar de qué manera, a veces, aceptamos un devenir que está escrito en la cultura pero no en nuestro propio interior.
¿Qué otros elementos son relevantes para esta puesta en escena?
Es muy importante el trabajo de movimiento, buscando las cualidades para los diferentes momentos de la obra. Además, hay un trabajo de vídeo, de iluminación y de banda sonora con un gran dinamismo. A nosotros nos gusta mucho hablar de que trabajamos en partituras donde trenzamos todos estos lenguajes, que es lo que hace la verdadera dramaturgia en la pieza.
En su opinión, uno de los momentos más bellos de este show:
Hay varios, porque son momentos de soliloquio donde vemos al personaje en una situación de fragilidad, donde apela directamente a lo que son las preocupaciones esenciales.
¿Qué rasgos representan mejor la esencia de la compañía de danza Mal Pelo, dentro y fuera de esta obra?
Mal Pelo siempre trabaja con diferentes lenguajes y en equipo. Le damos una importancia central al cuerpo, que es el todo para nosotros, es la reflexión y es la acción. Partiendo de ese lenguaje que hemos trabajado durante cinco años, nos ponemos en contacto con esa búsqueda de contaminación de otros lenguajes que, a veces, llevan caminos parejos. Por ejemplo, el caso de la música es para nosotros muy importante y no pensamos nunca en una música que ilustra o que se pone como un traje sobre lo que hacemos, sino que trabajamos con la idea de espacio sonoro con una persona que es Fanny Thollot y también con los músicos. En este caso, hay tres músicos que han grabado y trabajado específicamente para la obra. Solemos hacer un equipo muy grande para lo musical y, juntos, vamos buscando cuál es la combinación buena para la partitura que permita poner el foco en cada momento: a veces es en la palabra, otras en la presencia o el movimiento.
En suma de todo, ¿por qué recomienda este estreno a los amantes del teatro y la danza?
A los amantes de la danza porque pienso que es una partitura hecha desde el movimiento y tiene esa particularidad de poder dar la bienvenida a más texto de lo habitual. Y para los amantes del teatro, porque es una propuesta hecha con mucho cariño desde nuestro lenguaje, desde la ficción que podemos hacer desde el cuerpo hacia esa obra tan maravillosa que es “La vida es sueño”.