¿Cuándo y por qué decidiste ser actriz? ¿Tenías o tienes un plan B o ni te lo planteas?
Decidí ser actriz en el instituto, tuve la suerte de tener la asignatura de teatro en 3º de la ESO y de que mi profesor me invitase a formar parte de su compañía de teatro grecolatino. Ahí fue donde conocí los textos clásicos y descubrí que ser actriz era una opción, porque en mi educación no estaba en la parrilla de posibilidades. Después de vivir la experiencia de pisar el Teatro de Mérida me di cuenta de que, con toda seguridad, yo quería formar parte de esto.
Y de momento no me he planteado un plan B, supongo que si tuviera que acudir a alguno no podría estar muy lejos de lo que concierne al teatro.
¿Quiénes son tus referentes en la interpretación y por qué?
Mis referentes van cambiando según la etapa y mis inquietudes de cada momento. Me gusta el mundo de la investigación, de lo performático, de lo poético, de las nuevas maneras o de la vuelta de tuerca de lo anterior. Y siempre acabo contrastando con aquello que me enseñó mi maestro de interpretación Mariano Gracia: desde dónde genero y cómo lo comparto con mis compañeros para atrevernos a que pase lo que tenga que pasar. A partir de aquí puede tener cualquier forma.
¿Qué es lo más difícil de ser actor? ¿Qué obstáculos te has encontrado por el camino?
Creo que lo más difícil es la aceptación de vivir con la sensación de estar continuamente en la cuerda floja. Es un entrenamiento diario.
Con lo más difícil ya hecho, ¿qué consejo o consejos le darías a alguien que ahora mismo esté pensando en ser actor?
No estoy segura de que lo más difícil esté ya hecho…jaja.
Sin duda a toda persona que esté pensando en dedicarse a esta profesión en cualquiera de sus disciplinas le diría que adelante y a por todas, creo que es importante dar un lugar a las pulsiones y que no solo es necesario para uno mismo sino para para todos.
¿Qué esperas de tu carrera, cómo te imaginas el futuro, dónde te ves dentro de 10 años?
Me imagino más dueña de mi trabajo y con más herramientas para contar mis propias historias.
Tu papel soñado sería…
Me encantaría dar voz a algunas de las grandes mujeres de la historia como Mileva Maric, María Lejárraga o Camille Claudel mentes brillantes con dificultades sociales para desarrollarse. Me generan profundo respeto y admiración.
Para ti el teatro es…
Siento el teatro como un familiar cercano; es un vínculo muy grande y personal al que le debo grandiosos momentos, serias dificultades, importantísimos aprendizajes y por el que siento amor incondicional. Para mí, el lenguaje que elijo.
Cuéntanos algún proyecto que tengas entre manos.
Ahora mismo estoy de gira con una función que se llama La comedia de las mentiras, escrita y dirigida por Pep Antón Gómez. Ya estrenamos en el Festival de Mérida el verano pasado siendo una experiencia impresionante, y estaremos por Madrid, concretamente en el Teatro de la Latina, de Marzo a Mayo. Así que a por ello con mucha alegría.