Además de uno de los más bonitos de la capital, ¿cómo es el Teatro Infanta Isabel del 2023 y cuáles son los retos a los que se enfrenta?
El Teatro se enfrenta al difícil reto de salir adelante en un mundo donde se impone la velocidad, la inmediatez, un mundo cada vez más insensible y falto de reflexión. Nos enfrentamos al reto de tener que reconstruir unos públicos que la pandemia nos ha quitado de cuajo, unos por las razones más obvias y otros porque está vorágine de las “no tan nuevas” tecnologías de la comunicación acaparan cada vez más espacios.
Es un reto, no sólo para el Teatro Infanta Isabel, sino de todo el sector volver a poner en valor la inmensa riqueza que se encuentra en las artes escénicas en vivo, en esos 90 minutos donde la tecnología “muere” para dar paso a la vida, otra vida, junto a la propia, y que nos deja un poso en el estómago, el corazón, el cerebro, de un valor inconmensurablemente mayor al de un efímero tweet o post con el mejor filtro posible.
¿Cómo es el público fiel a este teatro?
Los teatros, salvo contadas excepciones, es difícil que tengan un público fiel o asiduo. Para generar estas fidelidades hace falta mucho tiempo, y la posibilidad de establecer planes a largo plazo, algo ciertamente difícil tanto en el Teatro como con la situación actual. Nosotros apostamos por hacer compatible un teatro, privado, que vive en gran medida de la venta de entradas, con una programación en la que se den la mano grandes profesionales, cabezas de cartel, y buenas funciones, de todos los géneros posibles.
En el año 2018 el teatro inicia una nueva etapa con un nuevo equipo. ¿Qué balance hacen de este tiempo?
El Teatro Infanta Isabel que tiene ya 130 años, es una verdadera joya arquitectónica y tiene una magia especial, tenemos la suerte de que atrae a muchas compañías. Al ser un teatro tan antiguo, tiene las limitaciones lógicas, en cuanto a espacios y escenario, pero con mucha imaginación y empeño, hemos conseguido dotarlo técnicamente de modo que podemos enfrentar con solvencia la necesaria “multiprogramación” para la viabilidad económica, con un aforo de 600 butacas pero con un formato muy cercano que hacen muy acogedoras las representaciones. Con el apoyo y la confianza de Ana Achiaga y Antonio del Castillo, propietarios del teatro, hemos conseguido montar un equipo que nos está permitiendo desarrollar un proyecto muy ilusionante en esta nueva etapa del Teatro Infanta Isabel.
¿Cuál es su gran apuesta para la nueva temporada? ¿Cuáles son las claves, los sueños?
Esta temporada nos alegra poder contar con el nuevo estreno de Els Joglars “El Rey que fue”. Celebraremos con ellos el 60 aniversario de la compañía, sin duda de las más longevas en activo y la vuelta de Albert Boadella a dirigir a Ramón Fontserè después de muchos años. Un capítulo más para la larga historia de este Teatro Infanta Isabel.
Muchos se lo preguntarán. ¿Qué tiene que tener un proyecto o un montaje ya hecho para que apuesten por él? ¿Cuáles son las líneas de programación?
Buscamos un equilibrio entre los textos más clásicos con apuestas por compañías emergentes. La multiprogramación nos permite intentar crear un abanico en nuestras líneas de programación que nos permitan llegar a un espectro muy amplio de público.
Otro foco es la creación de nuevos espectadores. Esta línea de programación tal vez sea algo menos visible a los ojos del público pero hacemos un trabajo importante en matinales y escolares del cual estamos muy orgullosos. Hay que tener en cuenta que eso que se conoce como “Campañas Escolares”, ha ido cada vez a menos en los últimos años, si no se invierte desde el ministerio de educación, las comunidades, Ayuntamientos, pues la oferta para niños y adolescentes se reduce y empeora su calidad, pero es que la pandemia fue fulminante en este terreno. Redujo literalmente a 0 las salidas al teatro de toda una generación de chavales y chavalas. Esto es algo que se podrá medir dentro de 20 o 30 años. No es una frase hecha, si en la infancia y adolescencia no has escuchado música, no has leído, no has ido a museos, al teatro, en definitiva si no has tenido contacto con el arte, es muy difícil que en la edad adulta lo busques.
“La ternura” abre la nueva temporada en la calle Barquillo, 24. ¿Qué idilio tienen con esta pieza que no para de volver y volver?
Con LA TERNURA de Alfredo Sanzol, tenemos una relación especial, por un lado porque es la función con la que arrancamos nuestra andadura en el Teatro, pero porque es unos de esos ejemplos que ilustran que es posible poner en pié una función de éxito sin nombres super conocidos. Ya cuando vimos esta función en la Abadía, nos hicimos la siguiente reflexión: “Que pena, otra función buenísima, con un texto brillante, un elenco súper talentoso, divertidísima, etc …” que tras su paso por un teatro público acabará, guardada en un cajón, para el recuerdo. Decidimos que nos la jugaríamos, y junto a LAZONA TEATRO que también apostó por ello, nos atrevimos a romper ese cliché, de que hay producciones que son para el Teatro llamado público y otras para el privado.
La Ternura va camino de convertirse en un fenómeno teatral de referencia de este país. De hecho, está ahora mismo un un proceso de internacionalización, empezando con representaciones en varios países latinoamericanos además de su estreno en las salas de cine a principios del mes que viene.
También en septiembre regresa “Muerte de un viajante” con Imanol Arias y en diciembre “Escenas de la vida conyugal” con Ricardo Darín. ¿Qué más grandes nombres van a pasar por aquí?
Ramon Fontserè, Gabino Diego, Esther Acebo, Pepe Viyuela en obras de grandes autores y con grandes directores como Alfredo Sanzol, Albert Boadella o Álvaro Tato. A lo largo de la Historia, con H mayúscula, por el Teatro Infanta Isabel han pasado los más grandes y nos sentimos en la responsabilidad de mantener siempre ese legado.
Más tarde llegarán Yllana y Ay Teatro. No falta el humor en el Infanta Isabel.
El humor nunca puede faltar a lo largo de una temporada en el Teatro Infanta Isabel. Desde que llevamos la programación del Teatro Arlequín en 2017 hemos tenido siempre presencia de Yllana ya que es una compañía única en Madrid, este año volvemos a apostar por “Maestrísimo” para el periodo de Navidad. “Vive Molière” de Ay Teatro tiene muchos de los aspectos que buscamos en una obra, es divertidisima, son un equipo de un enorme talento y además tiene una parte pedagógica que nos reafirma en la creación de público con la ayuda de campañas escolares y matinales como hemos mencionado anteriormente.
Hemos hablado de espectáculos muy aplaudidos, pero seguro que también nos sorprenderán con algún estreno…
Contamos con dos estrenos que darán que hablar, “The Shape of Things” de Neil LaBute protagonizada por Esther Acebo y dirigida por Andrés Rus traerán de nuevo este exitoso montaje a Madrid. “Jardiel Enamorado” será también un estreno en Madrid, dirigido por Ramón Paso, volverá a traer al Teatro Infanta Isabel esa presencia de Poncela de la mano de Pepe Viyuela.
¿Qué más nos depara la programación ya en 2024?
Volvemos a tener el placer de contar con el espectáculo “Miguel de Molina al Desnudo” escrito y protagonizado por Angel Ruiz y dirigido por Felix Estaire. Es uno de los montajes más bonitos y redondos que hemos programado en este teatro y que ahora vuelve tras una temporada de éxito en Buenos Aires.
Queremos apostar también por una cuidada selección de espectáculos familiares en la cual estamos trabajando, de momento ya podemos anunciar que volveremos a contar con LOS TITIRITEROS DE BINÉFAR, y su espectáculo «Maricastaña».
¿Por qué es siempre un planazo acercarse al Teatro Infanta Isabel?
Ir al teatro, a cualquier teatro ya es un un buen plan, y si es bueno además te va hacer sentir, llorar, reír, enfadarte, alegrarte, suena a topicazo, pero es que se trata precisamente de eso, y además “la experiencia” (como dicen ahora los nuevos vendedores) se completa cuando lo compartes, lo comentas, lo contagias, y cara a cara, no en las RRSS.
Nosotros ponemos todo nuestro empeño en la selección de los espectáculos pero el planazo es gracias a todo el maravilloso personal que tenemos, desde el equipo técnico al de acomodación, a nuestro personal de puerta y de taquilla. Ellos son los artífices. Por supuesto al trabajo de los artistas y las compañías que pasan y porque no… un poco gracias a las cervezas de después en el Rocafria.