Ha confesado que fue usted quien le propuso a Ricardo Darín hacer esta obra… ¿Nos cuenta cómo fue ese momento y por qué precisamente este proyecto y no uno nuevo?
Vi la versión anterior con otra actriz. Unos meses después Ricardo me contó que no la seguirían porque ella tenía otros compromisos. Yo le pregunté si él no quería seguir, y me dijo que sí. Entonces se me ocurrió decirle si no quería hacer una nueva versión, conmigo. Al instante me preguntó si me animaba a hacerla 3 meses en Mar del Plata, mítica temporada teatral de verano. No lo dudé, le dije que sí. Me parecía increíble estar haciendo a Bergman en un lugar de vacaciones, en donde la gente quiere distenderse, supuestamente, no pensar. El público argentino es muy especial, tiene un ejercicio teatral que a mi me conmueve. Fue un éxito. Volvimos a la capital, hicimos unas semanas en el Maipo. Después gira por otras provincias de nuestro país, fuimos a Perú. Las experiencias que tuvimos son de un cariño y una entrega del público enorme. Nos seguimos divirtiendo, la obra nos sigue interpelando a nosotros, también. Y bueno, aquí estamos.
¿Cómo describiría “Escenas de la vida conyugal” y qué se esconde bajo este magistral texto de Ingmar Bergman, de qué habla, qué grandes temas se tratan?
Escenas es una obra que habla del amor de pareja en estos momentos del mundo en donde la familia parecería ser el único encuadre para ese tipo de relación. Habla del dolor que lleva tratar de encajar en una estructura institucional. Las frustraciones, las desilusiones, las contradicciones que esto supone. Y cómo el amor va por otro lado, arma otro camino. Creo que esto de la institución familiar, matrimonial, social en articulación con el amor, sus tiempos, sus necesidades es uno de los grandes temas de Bergman.
Háblenos de Mariana, su personaje, ¿cómo la describiría, cómo es, cómo evoluciona?
Mariana es una mujer que tiene muchas herramientas intelectuales y afectivas. Es consecuente con el amor que tiene a sus hijas y a ese hombre y día a día camina con eso a cuestas. Es alguien que crece con el dolor, que se adapta. Es intuitiva, graciosa sin proponérselo. Contradictoria. Y es muy femenina. Creo que es fácil identificarse con ella.
Tras “Relatos salvajes” repite en cartel junto a Ricardo Darín. Cuéntenos cómo es y cómo es trabajar con él.
Actuar con Ricardo es una experiencia de mucho aprendizaje para mí. Es un actor muy perceptivo, receptivo. Muy conectado, muy atento. Todo lo que uno propone encuentra eco en él y se expande. (En Argentina tenemos un dicho: Le tirás un hueso y te devuelve un perro.) Es generoso y muy caballero. Me divierte en el escenario, me hace reír. Me encanta verlo actuar. Es alguien que está siempre pensando sobre lo que hacemos, lo que el público va a ver. Mucho que aprender…
Tras su brillante interpretación en “Relatos salvajes” y esta delicia que ha triunfado en Argentina, parece que todos coinciden en que es ‘su momento’. ¿Cómo es la Érica Rivas que llega ahora a los Teatros del Canal de Madrid, cómo vive este momento de éxito y qué le da el teatro?
Te agradezco mucho. La sensación de que es “mi momento” me suena a algo que va a dejar de existir en poco tiempo. La película fue algo enorme, muy generoso con todos. Me encanta que haya sucedido y no solamente por mí. Creo que fue una puerta enorme para el cine argentino.
Yo trabajo desde hace mucho en mi país y me da mucha ilusión el público español. No sé cómo llego a España…! quiero decir, tengo ansiedad de sentir cómo se resignifica la obra allá, cómo la reciben, qué cosas genera, qué les resuena, qué aparece.
No soy una persona ambiciosa, digamos en el sentido del éxito, según los cánones del mercado. El reconocimiento me llegó un poco tarde, y ya no me lo creo mucho. Sigo siempre trabajando. Nunca decidí hacer algo porque me convenía, quiero decir, mi norte no fue, ni es, el éxito. Me interesa la actuación, me interesa el teatro, el cine… el arte es mi militancia, mi sostén, un gran amor desde muy joven.
Me costó ser actriz. Reconocerme como tal.
Llegar a actuar en España es una felicidad porque de allí son algunos de mis referentes, escritores, cantantes, directores de cine, de allí llegaban canciones, teatro, poesía y películas que marcaron mi vida para siempre. De allí son mis antepasados familiares y tengo grandes amigos españoles, hermanos del alma.