Esteve Ferrer

 
Háblenos de este título. ¿Qué es «Los Pelópidas», cómo definiría esta comedia y qué tiene de especial?

 “Los Pelópidas” es la obra más simbólica del autor alicantino Jorge Llopis. Es una muy buena comedia, diría que junto a la “Venganza de Don Mendo”, es la gran comedia de su género, caricatura de la tragedia griega que bebe de los grandes modelos del género paródico y versificado, que busca la comicidad verbal en el retruécano, la ocurrencia y el ingenio de su estructura dramática.


Imagino que como buena comedia, a través del humor nos enfrentará a grandes temas. ¿De qué habla, en qué llagas mete el dedo?

Llopis nos ofrece una  revisión personalísima de los dramas griegos, construyendo una sátira desmitificadora, alegre, irónica, jocosa, maravillosamente disparatada, mostrándonos, desde una perspectiva muy distinta, a través del humor más sano, algunos de los héroes, historias, conflictos y situaciones por todos conocidos de las grandes tragedias  griegas.  Personajes arquetipos de aquel teatro, como el ídolo traicionado, la reina infiel y vengativa, el rey usurpador del trono, el mensajero portador de noticias tremebundas, el filósofo instructor, la fúnebre pitonisa, la entregada nodriza, los omnipresentes dioses, el pueblo descontento, …se presentan ante el espectador con una finalidad diferente para la que fueran concebidos, hacerle reír y desmitificar.


¿Qué caracteriza la escritura de su autor, Jorge Llopis?

Jorge Llopis fue uno de los grandes humoristas de la posguerra, y supo plasmar tipos, sociedades y costumbres como nadie. La frescura de su humor es envidiable. La maestría en la escritura y concepción de Los Pelópidas dan sobrada muestra de su talento e agudeza como poeta y escritor satírico.


¿Cuál ha sido la intención de Esteve Ferrer a la hora de poner en escena el montaje? ¿Cómo es su puesta en escena?

Jorge Llopis se dio a conocer por sus colaboraciones en la revista de humor La Codorniz, y con esa premisa empecé a trabajar, con la intención de plasmar ese humor gráfico e vertiginoso, muy ligado a la inmediatez del momento y con una gran coordinación entre la imagen y el texto. La puesta en escena es una sucesión de viñetas hilarantes, acuciosamente ligadas que llevan a querer seguir leyendo más y más. Es adictiva como los buenos comics.


¿Cómo recuerda la experiencia en Mérida?

Como un regalo que esta profesión me hace de vez en cuando, y ya van cuatro. Pensar que algo que es solo una idea en tu cabeza, va a pasar a ser real en el teatro donde hace 2000 años empezó todo, es la sensación más impactante e estimulante que puede tener un director.


¿Por qué  no debemos perdernos «Los Pelópidas»?

Porque todos y cada uno de los que hemos participado en este disparate y despiporre escénico, hemos puesto lo mejor de nosotros para rendir el más sincero y merecido homenaje a una de las grandes obras del repertorio del verso cómico español, por supuesto injustamente olvidada, y que también es muy español. Y porque puede ser una gran idea acercarse al Teatro Bellas Artes, y en el día a día lo más importante es tener buenas ideas.

NOTICIAS RELACIONADAS

Lo más leído
REVISTA TEATROS GRATIS

¡Apúntate a nuestra newsletter!

Recibirás un email semanal con la revista completa, la actualidad destacada y ventajas exclusivas.