¿Qué encierra “Grandes éxitos”?
¡Una comedia musical disparatadísima con muchísimo ritmo! Damos un paso más allá con respecto a “Iba en serio”, porque llevamos cuatro músicos en directo.
¿Qué narra esta nueva historia de Juan Carlos Rubio?
El encuentro de un presentador de TV y una amiga suya, Blanca del Bosque, una diva trasnochada con la que tenía mucha relación. En cierta ocasión, ella fue al programa y se sintió atacada y defraudada por su amigo. Al presentador le ofrecen grabar un disco y pone como única condición hacer un dúo con ella, la cual vivió mejores épocas pero ahora se ve obligada a tragarse el orgullo. La comedia narra el encuentro previo a la celebración del concierto de ese disco.
Coprotagoniza este musical con la grandísima Marta Ribera. ¿Por qué la eligieron a ella?
Teníamos claro que tenía que ser ella porque es uno de los principales talentos del teatro musical de este país, con una trayectoria en la que ha hecho absolutamente todo. ¡Yo soy muy fan de ella!
Si pudiéramos hacer una analogía entre Blanca del Bosque y alguno de los personajes que han pasado por la vida de Jorge Javier Vázquez, ¿quién podría ser?
Serían muchas. Creo que la relación presentador-artista es siempre muy complicada. Muchos presentadores y muchas artis-tas se verán reflejados pero, sobre todo, lo que el público va a ver es una comedia desternillante.
Para usted, uno de los grandes momentazos de la función se produce cuando…
Cuando nos quedamos ella y yo a solas. Y sólo te puedo decir que, ya en el tercer ensayo, tuve que parar… ¡porque me ponía a llorar! (risas) ¡Te lo juro! Es uno de esos momentos con su pellizquito de emoción en el que me costaba seguir, así que tuvimos que diseñar un plan B por si eso me pasaba en escena.
Le veremos interpretando grandes éxitos musicales. ¿Cuál de ellos tiene un impacto profundo para usted y por qué motivo?
No me gusta desvelar el repertorio, pero sí que me hace mucha ilusión hacer un tema inédito que estrenaremos para el musical, uno de los ingredientes fuertes del espectáculo, que es una canción llamada “Amistad imperfecta”.
Además de Marta y los músicos, veremos a Alejandro Vera y Beatriz Ros en escena. ¿Cuáles son sus roles?
Alejandro interpreta al productor musical que mete en toda esta historia al presentador. Beatriz es su asistente y la pobre tiene que hacer frente a todas las locuras de la gente que está sobre el escenario. El público se lo va a pasar muy bien con ellos.
¿Qué hace de “Grandes éxitos” una propuesta irresistible?
Que tiene todos los ingredientes para que le guste a muchísima gente: a los amantes de la música en directo y a los del teatro de texto –gracias a Juan Carlos Rubio, que es uno de los mejores autores de este país–. Esta combinación nos va a traer muchas alegrías, estoy seguro. ¡Y que dejen de lado que estoy yo! (risas) Hay mucho talento en el escenario.
Si usamos su propia adrenalina como medición, ¿qué momento alcanzó un pico más alto? A) su primerísima vez ante las cámaras de TV; B) su estreno absoluto en las tablas al frente de “Iba en serio”; C) desnudar su intimidad en las páginas de su primera novela biográfica.
Tengo la suerte de que cada uno de ellos me produce muchísima adrenalina. Pero yo creo que el teatro, porque me pilló ya a los 45, a una edad en la que eres mucho más consciente de lo que te sucede alrededor. Con 27 que empecé en la TV estaba más nervioso que disfrutándolo, tanto, que tuve que dejar la tele durante una temporada porque era incapaz de ponerme delante de una cámara, no me producía ningún placer. Sin embargo, en el teatro, lo que sucedió fue que, en cuanto empezamos con la función, quería hacer más y más y más funciones. Eso es muy bueno.
Compagina varios trabajos. ¿Qué le aporta cada faceta? Empezando por… presentar “Sálvame”:
Me da muchísima marcha y alegría, porque llevo más de 9 años con la misma gente y tenemos ya un punto de conexión muy importante. Es como trabajar con parte de mi familia.
Escribir en su blog y revistas:
Me sirve muchísimo de terapia, de que me surjan dudas y me plantee cosas, que es algo que me encanta.
Haber relevado a Mercedes Milá en “Gran Hermano”:
Es un orgullo, porque es una de mis pre-sentadoras favoritas de todos los tiempos.
Enfrentarse en un teatro a un patio de butacas lleno:
¡Una maravilla! Tener al público delante y sentir qué está pasando en cada momento durante tu trabajo es una sensación indescriptible.
¿Me confiesa una obra de teatro, un libro y una película que jamás se cansará de recomendar?
Obra de teatro: “¡Ay, Carmela!”, libro: “Nubosidad variable” de Carmen Martín Gaite y película: “Un lugar en el mundo” de Adolfo Aristarain.
¿Qué personaje entrevistado le hizo amar su profesión?
No podría mencionar a uno sólo. Yo, que soy de la década de los setenta, he mamado muchísimas horas de televisión y tengo un abanico amplísimo de gente a la que admiro. Creo que le debo mucho a la propia televisión el querer trabajar en el medio.
Mas allá de focos y cámaras, ¿con qué se chupa usted los dedos?
Con todas las comidas que hace mi madre: las paellas, las legumbres… ¡todo, todo, todo…! (risas).
¿A quién se llevaría para pasar un mes en una isla desierta?
A mi novio. Soy así de tradicional.