Marisol Ayuso

 Cuentan que un pintor dijo de ella que era la mujer más guapa que ha habido en la revista. Curtida en cine, teatro y TV, bailarina y vedette, inolvidable como Doña Eugenia en “Aída”, los ojos verdes de Marisol Ayuso pasan de encarnar a La Dama de “Pluto” a hacer de Doña Adela.
Hasta hace nada interpretaba a La Dama en “Pluto”, otra obra que hablaba de corrupción. Parece que se está aficionando a este tema…

(Risas) No es una afición, por Dios, pero sí es que parece que está de moda ahora, pero ha estado de moda toda la vida. Fíjate esta función a mí me recuerda mucho a “Pluto”, es igual, ya en aquella época había corrupción y por lo que se ve esto no cambia ni cambiará.


Aristófanes en el año 380 antes de Cristo,

Sí, señora, ya figúrate tú la que hubo en la Grecia de aquella época, todo lo que hicieron con cargarse la democracia. La historia se repite.


El teatro es teatro y Arniches escribe una divertida comedia, pero ¿qué siente Marisol Ayuso cuando lee/escucha noticias de corrupción y demás?

Es que ha habido momentos en que no he podido ver las noticias.¡Cómo puede haber gente tan poco solidaria, con tan poco amor al ser humano! Estamos totalmente deshumanizados, no nos importa nada más que lo nuestro. Mi madre, que hace ya que falta cuarenta años, que decía ‘vamos a tener que comer o más tarde o más pronto o apagar la televisión y no ver las noticias’ y yo a veces me acuerdo de ella y digo ‘qué razón tenía’, es imposible, llega un momento que tú sensibilidad está tan tocada que es imposible seguir. Todas estas barbaridades y yo te advierto una cosa: hay momentos en que me da miedo porque yo no sé qué va a pasar.


¿Quiénes son los caciques hoy?

Ya lo sabes tú como lo sé yo, la mayoría de todos los políticos corruptos que tenemos en este país o empresarios o… y que además luego no les pasa absolutamente nada porque lo principal es que les obliguen a que devuelvan el dinero y aquí quién devuelve el dinero. ¿Qué ha pasado con la infanta y con Urdangarín? Y otra gente también. Porque son unos privilegiados y mira dónde están viviendo y con escolta y dices tú ‘¿qué pasa, que aquí se protege al delincuente, al sinvergüenza, al que roba?’.


Nos estamos poniendo muy serios, pero esto es una comedia…

No, nos estamos poniendo muy serios, pero es la verdad. Lo que pasa es que esto es una comedia que está llevado en clave de humor y que muchas veces a estas cosas le tienes que sacar la parte cómica porque todo esto es como una tragicomedia (risas). Es verlo con comicidad y reírse un poco de ello, pero la realidad está ahí.


¿Qué destacaría del montaje?

El trabajo que está haciendo Ángel que me parece que además es muy laborioso, parece que no, pero es bastante complicado porque esta obra además tenía muchísimos más personajes y han tenido que hacer una adaptación con menos personajes. Eso es a veces una labor de chinos. Yo lo encuentro muy difícil y está haciendo un trabajo estupendo.


Háblenos de Doña Adela, ¿quién es y cuál es su papel en la obra?

Doña Adela es un personaje de una mujer que tuvo en sus tiempos un amor que la falló, que la engañó y luego ella hizo su vida, se casó y por unas serie de circunstancias de la obra que si te cuento, te digo de lo que va y no tiene gracia desvelar todo esto, pues todas las cosas que pasan por x circunstancias ese amor que tuvo ella se presenta allí donde viven ellos y ahí es donde empieza toda la trama y el follón de la función.


Un carrera es muy larga, pero la historia reciente de la TV le ha hecho un hueco gracias a la inolvidable doña Eugenia. Pero usted ya había hecho más TV y mucho teatro, revistas, cine… ¿Qué lugar ocupa el teatro en su carrera, qué significa el teatro para usted?

Para mí es el principal y creo que es la base para todo actor y actriz y a mí es lo que más me gusta. El teatro es lo que más he hecho y donde yo me encuentro mejor.


¿Es tan mágico como dicen?

Sí, lo es. Y ya no te quiero decir cuando estuvimos en Mérida que he tenido la suerte y el honor de pisar ese escenario, esa tierra, ese lugar tan mágico, tan impresionante… Luego pisar un escenario más normal… a mí me da mucho respeto, cada vez más, porque a medida que vas cumpliendo años te das cuenta de lo difícil que es esta profesión, que siempre estás aprendiendo, y yo le tengo mucho respeto al escenario y a la vez es donde me siento mejor dentro de las inseguridades que tenemos los actores.


¿Alguna vez estuvo tentada a dejar la profesión?

Sí, siempre ha habido muchos momentos en que dices ‘ya lo dejo’, ‘ya estoy harta, cansada’, pero luego no. Además que también vives de esto, es tu medio de vida y que aparte hay una cosa: yo me he acostumbrado a trabajar desde tan joven, de vez en cuando necesito un descanso como todo bicho viviente, pero enseguida me canso de descansar, de estar mucho tiempo descansando y estoy deseando trabajar porque es lo que me da vida. A mí el trabajo y el saber que tengo que estar a una hora en un teatro, que tengo ensayos, a mí me da vida.


Y cuando no está trabajando, ¿qué hace Marisol Ayuso?

Todo lo que a lo mejor en otro momento no puedo hacer, ver alguna obra de teatro que no has podido ver antes, ir al cine o leer ese libro que tienes ahí pendiente, hablar con gente de la familia, que la tienes un poco olvidada, o con amigos. 

NOTICIAS RELACIONADAS

Lo más leído
REVISTA TEATROS GRATIS

¡Apúntate a nuestra newsletter!

Recibirás un email semanal con la revista completa, la actualidad destacada y ventajas exclusivas.