¿De qué habla “El amor de Eloy”?
Habla de las relaciones personales, de la evolución de una relación de pareja, desde el inicio hasta la madurez de la pareja.
Pero lo hace de una forma muy peculiar…
Esa evolución de la pareja es lo que encarnan cada uno de los Eloy. Son tres personajes masculinos, pero para ella sólo hay uno: Javier es el inicio, el romanticismo, todo lo bonito; Raúl es la cotidianeidad, el vivir juntos, le quieres pero ya no te parece todo excepcional y David es la madurez, la templanza, el aceptar a la persona como es…
¿Y cómo es ella?
Es una mujer que tiene las ideas bastante claras y sabe muy bien lo que quiere, no es manipuladora, pero utiliza muy bien sus armas.
Y Patricia Pérez, ¿qué tipo de chico prefiere?
A los tres (risas). No se pueden separar, yo no quiero una persona sólo romántica, sólo racional o sólo pesimista, yo quiero un todo. A mí los hombres me gustan enteros (risas). Con seguridad en sí mismos, sentido del humor y sentido de la responsabilidad.
Es su primera vez en teatro, ¿hay nervios?
Hice teatro cuando trabajé en Argentina, pero hace siglos. No es la primera vez que me lo ofrecen, pero sí la primera vez que digo que sí porque los diálogos me encantan. Ernesto Caballero ha hecho una obra fantástica. Siempre hay nervios porque soy una persona que me entrego mucho.
¿Algún otro proyecto entre manos que se pueda contar?
Ahora mismo con esto y con mi productora. El teléfono suena, tengo proyectos. La tele, la vida en plató es lo que más me gusta