¿Cuál es su rol?
Soy la hija de un vicario que es todo lo contrario a su padre (risas) y le da vida hacer el calendario porque es madre soltera y organista de la iglesia.
¿Cómo definiría personalmente a cada una de sus compañeras?
Beatriz: muchísima fuerza que nos da a nosotras también. Asunción: ternura infinita. María: sensibilidad a flor de piel.
¿Y a usted misma?
Amiga de mis amigas, que me gusta trabajar con las chicas. Siempre se dice que las mujeres no nos llevamos bien y yo soy un ejemplo de todo lo contrario. He estado toda mi vida trabajando con Elena –’Las Virtudes’–, siempre se ha dicho que nos llevábamos mal y es mentira. ¡De hecho seguimos juntas!
Alegato final: ¿por qué no debemos perdernos “Las chicas…”?
Porque es absolutamente completa, muy divertida, traspasa los límites. Parece que se asocia todo lo malo a la edad madura de las mujeres y ellas demuestran todo lo contrario: que están vivas.