Publicado el 12 de Abril de 2024 a las 13:00 horas
'La voluntad de creer', Max 2023 a mejor espectáculo, regresa a Naves del Español
Galardonada con el rotundo Premio Max a Mejor Espectáculo de Teatro 2023, regresa a las Naves del Español "La voluntad de creer", esta joya de Pablo Messiez que pone la atención en la creencia a partir de un personaje que sostiene ser Jesús de Nazaret. Protagonizada por Marina Fantini, Rebeca Hernando, María Jáimez, José Juan Rodríguez, Sergio Adillo y Mamen Camacho, nos adentramos en esta aplaudida función que plantea cuestiones como: ¿Qué relación hay entre voluntad y fe? ¿Qué hace que algo sea verosímil? ¿Qué papel ocupa la voluntad en la sugestión? Del 13 al 26 de abril.
Tomando como punto de partida la película “Ordet” de Dreyer –que termina con una de las escenas más bellas y de verosímil más osado que Pablo Messiez ha contemplado en su vida–, el dramaturgo y director argentino propone en escena a una familia cuyo hijo menor cree ser el mismísimo Jesús de Nazaret, a pesar de que sus hermanas consideran que ha enloquecido por exceso de lecturas de Kierkegaard. Como en “Ordet”, habrá muerte y resurrección. Y, sobre todo, el deseo de jugar con la percepción del espectador de modo que la propia función sea una puesta a prueba de su fe.
“La obra se construye a partir de intentar comprender cómo funciona la creencia y qué relación tiene con nuestra voluntad. En la función, nos encontramos con una familia en la que Juan, el hijo menor, dice ser Jesucristo, que ha vuelto a la tierra. Aunque al principio nadie cree en él, finalmente una de sus hermanas, Paz, terminará haciéndolo. Y accediendo a su pedido, Juan hará un milagro que conseguirá poner en duda las cosas en las que creían antes, haciendo nacer una nueva fe”, comenta Messiez.
Y añade:
“Felicidad es la hermana mayor. Está en silla de ruedas. Y no parece ser muy feliz. El nombre de cada hermana parece nombrar como un castigo aquello que no podrán tener. Paz es poeta y vive con la frustración de no haber podido dejar la casa y marcharse a vivir su vida. Dice que se ha quedado por no dejar sola a su hermana. Y Juan es el hermano menor y, desde hace un tiempo, vive en su realidad paralela en la que es Jesucristo que ha vuelto a la tierra. El Doctor es, también, una especie de maestro de ceremonias que mantiene una relación constante con el público y entra en la ficción cuando el embarazo se complica”.
Así, recibimos al que ha sido uno de los mayores espectáculos de los últimos años, el mismo con el que su creador mantiene un deseo fundamental:
“Ojalá podamos conseguir que en quienes nos acompañen nazca la voluntad de creer en lo que ven. No como se cree en una ficción, si no como se cree en lo evidente”.
La crítica ha dicho
“La obra propone un espacio-tiempo raro en el que convergen la realidad y la ficción, la prosa y la poesía, la vida y la muerte”, El País.
“Una puesta en escena diferente, turbadora, emocionante, poética... pero sobre todo personal”, ABC.
“Una función altamente divertida con tintes berlanguianos y absurdos”, El Mundo.
“Vemos la necesidad en la vida de tener fe en las cosas y en los individuos, a pesar de que a veces nos cuenten cosas imposibles”, Shangay.
“Algunos momentos cómicos, como la discusión en torno a la poesía, son memorables”, La Razón.
