Revista teatros

 Con la barba poblada, un aro en la oreja y los ojos remarcados con kohl negro. Firme en la guerra, cariñoso en el amor, fiero y frágil. Atravesado por los celos. Dice Otelo que los hombres deben ser lo que parecen y siempre, pero ahora más que nunca, Albadalejo parece y es un actor impresionante. Su figura imponente en escena se ha curtido en las grandes compañías de nuestro país –CDN, CNTC, Nao D’Amores o Noviembre Teatro–.

• Es su tercer Shakespeare con Eduardo Vasco. Cuando le dice que va a ser Otelo, ¿qué es lo primero que piensa Daniel Albaladejo?

Un sueño conseguido. Da significado a una carrera donde apuestas por arriesgar en la interpretación en toda la extensión de la palabra.

• No es ninguna tontería lo de encarnar a un personaje como éste. ¿Cómo ha sido este encuentro entre ambos?

Apasionante. Interpretar a “Otelo”, encarnar al “moro de Venecia” es un reto y una responsabilidad que llega en un momento muy especial para mí como actor. Aprender a entender el por qué hace lo que hace. Su bajada a los infiernos, su amor sin medida por “Desdémona”, el concepto de amistad y camaradería  con Casio y Yago, su inocencia y desconocimiento del ser humano.

• Háblenos un poquito de Otelo, ¿cómo es, qué destacaría de él?

Es evidente su gran capacidad militar como general de lo ejércitos de Venecia. Es clara, en la primera parte, que se nos presenta como un personaje con nobleza. El inspirador amor que siente por Desdémona, la fidelidad al Dux de Venecia y su gran adaptación a una sociedad veneciana donde se mueve con soltura y le hace ascender en su nivel social.

• ¿Cómo se busca la luz a un personaje a priori tan oscuro como Otelo?

En mi opinión, a priori, no es un personaje en absoluto oscuro. Es un militar de gran capacidad y de grandes valores de lealtad como dije anteriormente. Son las circunstancias que envuelven la trama lo que le hace “bajar” a los infiernos. Su fe ciega por la lealtad que le profesa a Yago. Su creer sin ver, su inocencia ante los acontecimientos le hace “despeñarse” y hacer algo abominable.

• ¿Para Daniel Albadalejo, cuál es la frase más impresionante que dice Otelo?

“He amado demasiado y sin prudencia, no he sido celoso hasta que la duda me volvió loco, he matado aquello que más amaba”

• Parece mentira que Shakespeare siga siendo prácticamente un contemporáneo nuestro porque sus obras no han perdido un ápice de vigencia. ¿Con qué nos vamos a encontrar en “Otelo” que podríamos ver cada día en los periódicos o en la televisión?

Por desgracia demasiadas cosas. Xenofobia, racismo, violencia de género, manipulación, mentira, prejuicios.

• Casi no se entiende a Otelo sin Yago. ¿Quiénes serían los Yagos de nuestro tiempo?

Todos aquellos que vierten ponzoña en oídos ajenos, todos aquellos que manipulan para querer ser algo en la vida, todos aquellos que se sirven de la inocencia del ser humano para después aplastarlos, todos aquellos que utilizan la ambición de otros para conseguir sus propósitos más oscuros.

• Este Otelo ha sido aplaudido ya prácticamente en toda España. ¿Cuál diría que ha sido el mayor acierto de Eduardo Vasco?

Sin duda su sinceridad para dirigir, para contar la historia. La confianza que nos da a los actores para creer en lo que hacemos y como lo hacemos. Su claridad como creador.

• Después de dos Lope, “Hamlet” y “Noche de Reyes”,  ahora “Otelo”. ¿Si Eduardo Vasco le dice ven, lo deja todo?

Es evidente.

• ¿Por qué es actor Daniel Albaladejo?

Para volar. Por necesidad de libertad. Para no estar atado. Para soñar y hacer soñar. Para morir y resucitar.

• ¿Qué le diría el Daniel Albaladejo de hoy al Daniel Albaladejo de hace diez o quince años?

Paciencia hermano que todo llega. Se feliz.

• ¿Con qué gran actor al que admire le gustaría tomarse un café?

Me lo tomo todos los días con mi compañero Arturo Querejeta (Yago).

• ¿Dónde más vamos a poder verle este año?

Sigo girando con “La Lengua en Pedazos” de Juan Mayorga con la maravillosa Clara Sanchis y a las órdenes del propio Juan Mayorga y producción de Entrecajas Producciones.