Publicado el 01 de Marzo de 2018
Entrevista a Álvaro Madrigal en Los jóvenes de la escena
Obra: Los jóvenes de la escena
De pequeño no había manera de que me quedase sentado, ¡tenía que estar bailando! Al principio era una afición y poco a poco se fue convirtiendo en mi principal actividad del día
Forma parte de la Compañía Nacio-nal de Danza desde septiembre de 2012. Ha bailado “In the Middle Somewhat Elevated” y trabajado en los ballets de grandes coreógrafos.
¿Cuándo y por qué decidiste ser intérprete, bailarín/bailarina? ¿Tenías o tienes un plan B o ni te lo planteas?
Todo empezó muy de pequeño, en Sevilla que es una ciudad donde el arte y el baile abundan. De pequeño en las ferias y en verbenas no había manera de que yo me quedase sentado.. tenía que estar bailando! entonces empecé a tomar clases de baile en el conservatorio. Al principio era una afición y poco a poco se fue convirtiendo en mi principal actividad del día.
Vengo de una familia de artistas. Mi futuro estaba dirigido a las artes plásticas pero al final me decidí por las artes escénicas, pero sigo teniendo en mente el estudiar Bellas Artes o incluso fusionar los dos artes.. me gustaría estudiar diseño de escenografía.
¿Quiénes son tus referentes y por qué?
De pequeño mis principales referentes eran los grandes bailarines de las grandes compañías.. en youtube hay videos antiguos que han inspirado a muchas generaciones.
Ahora gracias a las redes sociales tenemos acceso a videos de bailarines de todo el mundo y yo creo que todos nos pueden inspirar, sean conocidos o no.
¿Qué es lo más difícil de esta profesión? ¿Qué obstáculos te has encontrado por el camino?
Lo más difícil para mí es la constancia. Hay que ser muy perseverante y trabajar día a día.
Me considero una persona bastante sensible y me dejo llevar por mis emociones pero hay que saber canalizarlas. Cuando has tenido un día duro o estás triste hay que intentar no tirar la toalla y conseguir utilizar esos sentimientos a la hora de bailar. Si se consigue hacer puede ser muy ventajoso pero no es sencillo.
Con lo más difícil ya hecho, ¿qué consejo o consejos le darías a alguien que ahora mismo esté pensando en seguir tus mismos pasos?
Sobre todo que se centre mucho en las clases y que busque inspiración fuera de ellas… los primeros años son los más importantes, se construye la base con la cual vas a trabajar el resto de tu carrera. Hay que hacer sacrificios que cuando eres joven parecen un mundo pero luego miras atrás y te das cuenta de que todo ha merecido la pena.
¿Qué esperas de tu carrera, cómo te imaginas el futuro, dónde te ves dentro de 10 años?
Lo bueno de esta carrera es que nunca dejas de aprender, así que estoy ansioso por seguir trabajando las magníficas coreografías que trae la CND cada temporada. Siento que cada año descubro algo nuevo de mi.. tanto movimientos como sentimientos o rasgos de mi personalidad que ni yo conocía.
En 10 años no se donde me veo pero seguro que me veo con unas zapatillas de ballet puestas.
Tu papel/proyecto soñado sería…
Creo que ya estoy cumpliendo todos mis sueños de cuando era pequeño, pero cada año aparecen nuevas metas y voy a por ellas.
Para ti el teatro es…
Es la mejor forma de expresión..
Para mi la danza es una forma de liberarme y de hablarle al público o conmigo mismo si utilizar palabras.. bailando puedo decirle al mundo lo feliz que estoy o lo triste que me siento.. si echo de menos a alguien o si estoy lleno de rabia, incluso de alguna forma puedo despedirme de aquellos que ya no están y no he tenido la ocasión de decir adiós.
La danza es algo mágico siempre que la vivas y la interpretes desde el corazón.
Para mi la danza es una necesidad.
Cuéntanos algún proyecto que tengas entre manos.
Me gustaría promover la danza clásica y contemporánea en Sevilla.. uno de mis sueños es reunir a varios de los bailarines Sevillanos que estamos repartidos por diversas compañías de danza muy prestigiosas por todo el mundo y organizar una gala de bailarines Sevillanos en Sevilla. Es hora de que Sevilla conozca a sus bailarines clásicos y contemporáneos.