Revista teatros

 Adorado y recordado por sus monumentales obras de ficción realista y universal, pocos como Benito Pérez Galdós fueron capaces de plasmar sus propios deseos, contradicciones, obsesiones y sentido del humor en su legado literario. Algo evidente para una experta en la vida y obra del escritor como Pilar G. Almansa, directora de la pieza quien, apoyada en el texto de Ignacio del Moral y Verónica Fernández, sube a escena esta vibrante fotografía personal del dramaturgo que pone especial atención a su particular manera de amar: libre y sin complejos. Acompañados por Amparo Fernández, Marta Aledo, Diana Palazón, María Ramos y Ainhoa Santamaría, charlamos con los protagonistas de este prometedor estreno.  Por ANA VILLA..   

¿Qué presenta esta función y qué historia desarrolla en escena?

Jesús Nogüero: Esta función nos presenta el viaje que realiza Galdós en ese último minuto de su existencia en el que la vida desfila ante sus ojos (ciegos), recobrando la luz de su mirada en el encuentro y despedida de las mujeres que marcaron su vida y su obra.

¿Qué temas y sentimientos se respiran en esta obra centrada en Galdós?

Jesús: Algunos de los recurrentes de su obra y de su vida, como son el amor a la verdad, el amor a las mujeres, el amor a la patria y el amor a la libertad. La premisa inicial es que el público desee llevarse el personaje a casa, especial-mente el femenino.

Háblennos de su personaje en escena...

Carmen Conesa: Teodosia Gandarias Landete aparece en la vida de Galdós en 1906 y pasan sus últimos 15 años de vida juntos –¡ella muere 3 días antes que él!–. Era una mujer culta, viuda y sin hijos. La correspondencia entre los dos es un diario de la vida de Galdós, de sus trabajos, de sus enfermedades, de su ceguera y de su sufrimiento. En esta obra –”Sombra y realidad”–, Teo aparece para indicarle a Benito el camino de ese viaje póstumo. Ella le acompañará en la distancia y le vigilará en todo momento, acompañándole (al piano) a modo de banda sonora en todo este recorrido.

Jesús: Trataremos de prestar cuerpo y voz al gran hombre que sin duda fue Don Benito: un alma grande y un corazón humilde.

¿Quiénes y cómo son los otros personajes principales de la pieza?

Carmen: En la obra aparecen algunas de las mujeres importantes para él. No están todas las que fueron, pero sí las que le inspiraron en muchas de sus obras: Emilia Pardo Bazán, Concha Ruth, Lorenza, su prima Sisita... y personajes de ficcion, como Fortunata, Marianela, Tristana y Doña Perfecta.

Una frase inolvidable de este texto:

Jesús: “En mi corazón nunca he renunciado a nadie. Pero hay dentro de mí, allá en una de las cuevas más escondidas del alma, una tendencia a enamorarme de lo que no es común ni regular”.

Carmen: Añade Benito: “Renunciar es negar y negar es mentir. Hay que ser libre. Amar desde la libertad. Ser libre para amar con todas las consecuencias, hasta el final”.

¿Cuáles son las mayores aportaciones que el gran Galdós nos dejó a los amantes del buen teatro?

Carmen: ¡Gran teatro y grandes personajes de mujer! Conocía tan bien a las mujeres que las retrataba con toda su fuerza, pasión y contradicciones, llenándolas de realidad y crudeza.

¿Por o para qué es tan recomendable asistir a este estreno?

Jesús: Para descubrir y encontrarse con uno de los mayores referentes éticos e intelectuales de su generación, un sabio observador de las costumbres e historia de nuestro país.

Carmen: Porque se enamorarán de Galdós, de su magnetismo, de su sabiduría, de su capacidad de amar desde la libertad.