Revista teatros

Háblenos sobre la obra que le ha llevado a Mérida. ¿Cómo la definiría, qué tiene de especial y qué temas trata o a qué nos enfrenta?

Para mí es un texto que yo lo había leído durante mi época de bachillerato, yo estudié humanidades, pero lo habíamos pasado por encima, no me había parado a analizarlo como el análisis que hemos hecho esta vez de la mano de José Carlos Plaza, el director. Me parece que es una función que está por encima del bien y del mal, habla de cosas… A lo largo de mi carrera nunca me he encontrado con la posibilidad de decir unas palabras tan profundas y tan bonitas, que reflejen tanto al ser humano y luego ya lo que le hace espectacular es pensar que esto se escribió hace más de dos mil y pico de años. Hay ciertas partes de la función que solamente con leerlas a mí se me ponen los pelos de punta.

¿Quién es su personaje y qué le caracteriza, cómo es, qué le mueve, qué nos diría de él?

Mi personaje es Orestes. Así de entrada me parece un personaje inabarcable, un personaje que realmente las cosas que le suceden son tan sumamente grandes, profundas, que para atacarlo lo hemos hecho desde la máxima humildad. José Carlos ha estado trabajando mucho conmigo, hemos hecho muchas sesiones extra de trabajo para intentar llegar a entender algo de este personaje que, como digo, entender la totalidad requeriría años de estudio. Orestes es un chico que lo desterraron cuando tenía tres años a vivir con unos amigos de la madre, es decir, la madre lo desterró y años después, su madre mata a su padre, que vuelve vencedor de la guerra de Troya y cuando Orestes cumple los veinte años, el oráculo de Apolo, los dioses de alguna manera, se le presentan y le dicen que su padre fue traicionado, está sufriendo una vez muerto y que para vengar su muerte tiene que hacer justicia y matar a las dos personas que lo mataron, su madre y el marido de su madre. Claro, te puedes imaginar que entrar en escena con esta necesidad de matar a tu madre todo lo que le va a suceder es esa división de ideas de ‘tengo que hacerlo, pero ¿cómo voy a hacerlo?’. Digamos que se mueve en unos niveles de pensamiento muy altos.

Tres razones de peso para ir a Mérida y no perdernos el montaje que preparan...

El primero es que a día de hoy creo que única y exclusivamente se hace en Mérida, entonces ya me parece… El segundo es que yo he viajado a Mérida un año como espectador y me parece que es una de las mejores sensaciones que yo he tenido en mi vida ha sido meterme en el Teatro Romano de Mérida a ver una representación. Para alguien a quien le gusta el teatro es como ir a la Meca, simplemente con sentarte en esas piedras… Me acuerdo de que veinte minutos antes de la representación que fui a ver solamente con estar sentado en esas piedras y observar se me ponía el pelo de punta. Y la tercera tiene que ver más con nosotros, creo que estamos haciendo un espectáculo estupendo, José Carlos Plaza es un director maravilloso, tenemos un reparto y me siento muy privilegiado de poder estar trabajando con gente de la altura de Ana Wagener, Alberto Berzal, Juan Fernández… Creo que todo lo que rodea al espectáculo es estupendo. Pedro Moreno haciendo un vestuario que da gusto, todo el tema de proyecciones sobre las ruinas de Mérida… Creo que vamos a hacer un espectáculo que merece la pena que se vea.

Va a pisar este teatro por primeva vez, cuéntenos cómo se siente, qué le han dicho de él y qué espera de esa noche mágica.

La verdad es que con mucho respeto. Es tan grande el personaje y la función  que hasta el momento todavía no me ha llegado esa preocupación, estoy en otra cosa, estoy con la cabeza en intentar entender el máximo posible de la función, en intentar transmitir al máximo lo que le sucede a este Orestes y todavía no me ha caído la ficha de donde lo vamos a hacer. Será cuando llegue allí y me dé cuenta de ese pedazo de anfiteatro que es casi como ir a por los leones… De entrada muchísimo respeto e intentar desde la humildad hacer el mejor trabajo posible y que ojalá que disfrutemos de cinco noches maravillosas.

 Imaginamos que han echado ya un buen vistazo al resto de la programación. Recomiéndenos una obra (que no sea la suya) y díganos por qué esa...

Sí que lo he leído, por supuesto. Tengo muchísimas ganas de ver a las “Troyanas”, donde hay gente que conozco, está Maggie Civantos, Alba Flores, me parece que por lo que me contó hace poco Maggie tiene muy buena pinta lo que están ensayando y además Carme Portaceli… Seguramente será un espectáculo bastante chulo. Y luego voy a ver si por fecha de trabajo puedo y una vez que yo termine me puedo quedar un par de días más me encantaría ver “Calígula” de Mario Gas que lo protagoniza Pablo Derqui y me parece que es uno de los mejores actores que hay en España.